La selección argentina tiene dos caras bien definidas: con Lionel Messi es un equipo de elite; sin el astro del Barcelona, esta vez lesionado, es una formación irresoluta. Después del milagroso empate 2-2 arañado el martes en Mérida ante la débil Venezuela, los argentinos le ruegan al papa Francisco que su estrella no se lesione ni se enferme. O que no vuelva a renunciar.  

“Que Messi no se resfríe”, tituló en su página web el diario deportivo Olé tras la decepcionante actuación de la ‘Albiceleste’ en tierras venezolanas. “El peso de ‘Lio’ para que la selección sea un equipo de elite es total. Argentina sigue con el desafío de aprender sin él”, escribió.

Los números son contundentes: con Messi en cancha, la selección austral cosechó en estas eliminatorias tres victorias consecutivas (Chile, Bolivia y Uruguay). Pero sin él, apenas una victoria (ante Colombia), tres empates (Paraguay, Brasil y Venezuela) y una derrota (ante la ‘Tri’ en Buenos Aires).  

La conclusión es simple: cuando Messi no juega, Argentina tampoco. Ante Venezuela se vio un equipo sin ideas, tibio en el ataque, desbalanceado en defensa y colmado de errores que hasta contagiaron al arquero Sergio Romero, habitual figura. Y solo pudo rescatar un empate con coraje tras estar 2-0 en desventaja.

Erik Lamela, elegido por el entrenador Edgardo Bauza para llevar las riendas del equipo, no pudo ser Messi. Al volante ofensivo del Tottenham le quedó grande el puesto y le pesó la responsabilidad. Y sin Messi, sus compañeros solo deambularon en la cancha y se dejaron dominar por una ‘vinotinto’ que marcha última en el torneo y que mereció ganar.  

“Somos Deportivo Messi”, escribió el periodista Leonardo Farinella, director del diario Olé. “Es lógico que el mejor jugador del mundo cambie la ecuación de un equipo. Y también es lógico que no muestre un funcionamiento aceitado un equipo que está iniciando un camino con un nuevo cuerpo técnico. Con eso y todo, molesta el sonido de una alarma que no por conocida y entendible deja de preocupar. ¿Qué somos sin Messi? ¿Y eso somos sin Messi?”, añadió.

El diario Clarín eligió un título que deja al descubierto la alarma Messi: “Extrañar a ‘Lio’, después sufrir y preocuparse”. Precisó que “faltaron respuestas ante la ausencia” del astro del Barcelona FC.

“Con una tabla tan apretada en el camino hacia Rusia 2018 y pensando a futuro, Argentina no puede darse el lujo de prescindir del mejor futbolista del mundo. Quedó claro en Mérida. Por eso ahora habrá que comenzar a rogar para que el as de espadas de la selección juegue los diez partidos que faltan de las Eliminatorias”.

El periodista Adrián Maladesky, en una columna en el mismo diario, dijo que “nadie extraña más a Messi que sus propios compañeros. Desnudos de ‘Lio’, Di María, Banega y Lamela no se hacen cargo de agarrar la pelota y, menos, de conducir. Lo buscan y no está. La selección extraña a Messi y extraña también lo que no tiene: una segunda guitarra que lo ayude a Messi y que le permita a veces no estar”.

Todos los titulares de la prensa argentina mencionaron al 10. La Nación señaló en su portada “Sin Messi es una lucha” y escribió que “Argentina extrañó mucho a su capitán y con mucha entrega apenas pudo evitar el papelón. Argentina -sintetizó- no sabe jugar sin Messi. Sin él, nada es igual”.

Ahora, los fanáticos le prenden velas para que su ídolo se recupere pronto y esté en la próxima ronda de las eliminatorias en octubre, ante Perú y Paraguay. (I)