Los aficionados que asistieron al estadio Atahualpa, el martes pasado, para mirar el encuentro entre  Ecuador y Argentina, por las Eliminatorias para el Mundial de Brasil 2014, tuvieron la oportunidad de disipar la tensión y los nervios del encuentro con la amena lectura de las páginas de los diarios EL TELÉGRAFO y PP el Verdadero, que se distribuyeron antes del partido.  

La empresa editora de ambos productos, Editogran, estuvo presente en el escenario quiteño y puso a disposición de los espectadores sendos ejemplares en cada uno de los asientos numerados del escenario, distribuidos en forma  gratuita en las localidades  de preferencia, general, palco y tribuna.

El contenido de la edición tuvo información variada en temas políticos, sociales, culturales, económicos y deportivos, incluyendo un póster del seleccionado tricolor.

Quienes “madrugaron” al estadio, alrededor de las 11:00, con el propósito de tener mayor comodidad y hasta holgura, se dieron tiempo para informarse del acontecer nacional e internacional.

Los pósters de la Selección Nacional fueron guardados con especial celo, como un recuerdo del cotejoLa sección FANÁTICO de diario EL TELÉGRAFO presentó a los lectores un especial de 14 páginas con material alusivo al partido que se disputó el martes anterior. También contó con una reseña histórica del estadio Olímpico Atahualpa, cuya inauguración tuvo lugar en 1951, y que fue uno de los temas más leídos en la espera del cotejo eliminatorio.

Pero este especial también incluyó notas sobre literatura futbolística y análisis sociológicos sobre la emoción que genera el “rey de los deportes” en Ecuador.  

Los pósters de la Selección Nacional fueron guardados con especial celo, como un recuerdo del cotejo en el “Coloso del Batán”, en donde los fanáticos miraron en acción al mejor jugador del mundo, Lionel Messi, en su esplendor,  aunque no haya sido más allá de treinta minutos.

Quienes no alcanzaron a ingresar al estadio por distintas circunstancias, en especial porque las entradas se habían agotado, estuvieron en las afueras del escenario respaldando a la Tricolor y vivieron el partido con la misma intensidad  que quienes se encontraban en el interior.

Un encuentro de singular importancia como el que disputaron “tricolores” y “albicelestes” atrajo a mucha gente y fue la oportunidad para recibir en forma gratuita ejemplares de los periódicos, para recabar una  información oportuna en distintos puestos de entrega.

Hubo gran receptabilidad por parte de los aficionados al trabajo desplegado por los dos medios impresos,  cuyo interés fue presentar una edición de “lujo” para un cotejo de tal importancia.