“Admiro a Ashley Cole, del Chelsea. Me gustaría moverme como él. ¡Voy a ser mejor que ese jugador porque yo soy Leonel Ramírez y él solo Ashley Cole. Muy pronto me verán en las mejores ligas”, suelta, entusiasmado, el futbolista de Independiente del Valle, quien convencido de sus cualidades busca pasar de las palabras a los hechos cada vez que ingresa a una cancha.

Juega como lateral zurdo en el segundo equipo de la tabla -con 10 puntos en su haber- y pronto realizará una pasantía en el Tottenham de Inglaterra.   

Está será la segunda ocasión en la que viaje a Europa por algo similar, luego de que en agosto del año pasado permaneciera en Alemania durante casi un mes, en el Borussia Dortmund.

Recién en agosto de este año cumplirá la mayoría de edad, algo que le impidió permanecer en suelo germano, pese a que el entrenador y los dirigentes del club quedaron impresionados con su buen rendimiento. “Ese fue el pequeño problemita”, comentó resignado, pero con la esperanza de que luego se le presentarán otras oportunidades.

Llegó al Independiente hace 3 años, luego de formar parte del Norteamérica, club filial del equipo del Valle en Guayaquil. En su natal Santo Domingo de los Tsáchilas jugó en el Perugia 33, equipo denominado así por el conjunto italiano donde militó Jaime Iván Kaviedes - también santodominguense- y por el número de camiseta que éste vistió en aquel tiempo.

Aún no está definida la fecha de partida de Ramírez a Inglaterra. Indicó que no ha hablado con Junior Sornoza ni con Carlos Gruezo, quienes el año pasado viajaron a realizar una pasantía al mismo equipo de Londres.  

“Si fuera mi primera vez, los hubiera buscado para tener más referencias. Me manejo siempre tranquilo y voy a aprender mucho de ese viaje. El fútbol europeo es exigente y rápido. Ya lo probé en Alemania”.

El año pasado debutó en primera categoría de la mano del entrenador Carlos Sevilla, después de disputar el Mundial Sub 17 en México con la selección ecuatoriana. Sumó 24 partidos con el primer equipo y este año lleva 5; es decir, ha actuado en todos los cotejos de su club.

“El Mundial me ayudó mucho para mostrarme y poder tener continuidad con mi equipo. He sumado muchos partidos ya en primera y de esa forma he podido llamar la atención de los equipos de afuera”. 

Su vida futbolística ha sido acelerada, pues hace tres años llegó a Independiente para jugar en la Sub 16 y en 2011 ya había debutado en primera. “Vine de un proceso exigente en las formativas y creo que esa ha sido la base para mantener la regularidad. Me pude acoplar rápidamente a mis compañeros y ellos también a mi juego”, señala. 

Recordó que en los primeros partidos que jugó tuvo algo de temor al enfrentar a Renato Ibarra, cuando era parte de El Nacional, por su velocidad y desequilibrio en la banda que Leonel marcaba. Pero con el pasar del tiempo, los temores se convirtieron en motivación y ahora ningún jugador lo intimida a la hora de defender a su equipo.

Llegar a la selección mayor y reemplazar a Walter Ayoví, uno de sus referentes en la banda izquierda,  es un objetivo que tiene a largo plazo. “Estoy convencido de que voy a estar en la selección muy pronto. Siempre se dice  que no hay muchos laterales zurdos en el país y yo tengo la capacidad de ocupar ese puesto”.

Algo que intenta explotar también es su velocidad para atacar, pero que hasta el momento no ha sido muy apreciada en los partidos que ha jugado.   

En las prácticas, el asistente técnico Fernando Baldeón le exige llegar hasta la raya final y lanzar centros hacia los delanteros para generar acciones de peligro.  

Con la seguridad de que la banda izquierda le pertenece, Ramírez busca alargar su racha como titular y fortalecer su talento con la pasantía que realizará en el Tottenham de la Premier League.

Estará en Londres, la misma ciudad sede del Chelsea, club en el que actúa Ashley Cole. A lo mejor se lo encuentra cualquier día por la calle y, seguro, luego de pedirle el autógrafo de rigor, podrá decirle: “he venido a ser mejor que tú”