Neymar y el Santos se enzarzan en una guerra dialéctica por su fichaje
El fichaje de Neymar por el Barcelona desencadenó hoy una guerra dialéctica con constantes desmentidos entre el jugador brasileño y el club Santos sobre esa operación que ahora está bajo investigación en España y Brasil.
El presidente del Santos, Luis Álvaro de Oliveira, que está apartado del cargo por baja médica, aseveró hoy con duras palabras que el padre de Neymar negoció con el Barcelona a sus espaldas y sin su consentimiento en 2011, lo que estaría en contra de los estatutos de la FIFA.
Pocas horas después, la web oficial de Neymar publicó un documento fechado el 8 de noviembre de 2011 supuestamente firmado por Oliveira, en el que se autoriza expresamente a Neymar a negociar con cualquier club, brasileño o extranjero.
La única condición impuesta por el Santos en ese documento es que Neymar se comprometiera a que la transferencia se efectuase en 2014, cuando vencía su contrato con el equipo brasileño.
El documento escaneado, en cuyo encabezado aparece escrito a mano "Anexo 1", tiene estampados los sellos del Barcelona y del Santos, además de seis rúbricas.
Con la publicación de ese documento, Neymar contradijo a Oliveira, quien dijo que en 2011 "no podía impedir" ni sabía de los tratos entre Neymar padre y el entonces presidente del Barcelona, Sandro Rosell.
"De nada sirve que le negase negociar. No se puede impedir que las personas hablen con quien quieran", dijo Oliveira en una entrevista a la radio ESPN, en la que criticó duramente al padre de Neymar.
Oliveira, que está apartado de la presidencia del Santos por problemas médicos, dijo que el padre de Neymar es "insaciable" y quería sacar beneficios hasta en una operación para renovar el césped del Vila Belmiro, estadio del Santos.
Neymar da Silva, padre del delantero, confirmó este martes que en 2011 firmó un compromiso con el Barcelona a través de su empresa N&N, que cobró 13,6 millones de dólares ese año y otros 30 millones en 2013, cuando el fichaje se concretó.
La Procuraduría (fiscalía) de la ciudad brasileña de Santos anunció hoy la apertura de una investigación para determinar si se cometieron delitos tributarios en esa transferencia, que también está siendo estudiada por un juez en España.
El Barcelona anunció el pasado agosto que el fichaje costó $78 millones, pero el total de la operación, incluyendo comisiones, salarios y otros pagos, alcanza los 180,6 millones de dólares, según reveló la semana pasada el club catalán.