Antonio Serpa/Especial desde Argentina

“Barcelona es uno de los grandes de Ecuador y de América, así que ¿cómo no voy a estar interesado en dirigirlo? Por supuesto que estoy con ganas de trabajar”. El que habla es Omar Asad desde la tranquilidad de su casa en Buenos Aires. Allí espera, junto a su familia, que se defina un futuro mediato que lo encuentra cerca de su conocida Guayaquil.

Es que allí el “Turco” pasó buena parte del 2011 dirigiendo al Emelec, justamente la contra. Por lo pronto, y a pesar de que ya hubo contactos con sus allegados, Asad prefiere la cautela: “La realidad es que todavía nadie se comunicó conmigo personalmente. Lo que sé, lo sé por los medios.

Escuché que estaba entre los candidatos, pero tampoco tengo muy claro cómo es la situación de (Luis) Zubeldía y no me gustaría hablar si hay un colega que aún continúa en el cargo (renunció el lunes)”, dijo, poniéndole un freno hasta a su propio entusiasmo.   

Después de su traumática salida de San Lorenzo, una experiencia que estuvo lejos de terminar como él esperaba –no pudo sacar del pozo a un equipo que continúa luchando por no descender y que sigue cambiando técnicos-, Asad estuvo a punto de entrenar a Estudiantes Tecos de Guadalajara, pero la posibilidad se frustró porque los mexicanos preferían a alguien que conociera más de cerca la plantilla y la interna del fútbol de ese país.

Esto es algo que, en cambio, no le sucederá en Ecuador. Los meses en los “eléctricos” le dieron al “Turco” un panorama y un conocimiento  bastante amplios como para llegar ahora y no sorprenderse.

“Desde lo deportivo, mi anterior experiencia en Ecuador fue buena, dejé al Emelec primero. Y el tiempo que estuve me sirvió para interiorizarme y conocer más el fútbol ecuatoriano”. ¿Qué sabe de lo que es hoy Barcelona? “Bueno, por supuesto que conozco su plantel, sé de su categoría y de sus posibilidades. En cuanto a la campaña actual, creo que con Zubeldía el equipo se hizo muy fuerte en lo defensivo”.

Por cierto, al técnico argentino no le fue nada mal en su anterior etapa. De hecho, lo conflictivo de su salida tuvo que ver no con la falta de resultados, sino con sus apetencias por dirigir a un grande de la Argentina como San Lorenzo, con el cual arregló su vínculo en un viaje relámpago a Buenos Aires para el cual adujo “asuntos familiares”.

A su regreso a Guayaquil, el DT negó que ya hubiera firmado contrato con el “Ciclón” argentino, pero la realidad marcó lo contrario y, para desvincularse, tuvo que pagar una cláusula de rescisión de $ 150.000. “Me sentí un esclavo”, dijo Asad al dejar Ecuador luego de apenas cinco meses de gestión, en mayo de 2011. Su Emelec hacía una muy buena campaña y contaba con grandes chances de ganar el torneo. En enero de ese año, cuando llegó, había armado una pequeña revolución sacando al equipo del país para hacer una pretemporada inédita en Mar del Plata, la ciudad más importante de la costa argentina.

¿Qué hizo el “Turco” de su vida luego de la salida de San Lorenzo? Buscó capacitarse y, para eso, viajó a Europa. Se reunió con Marcelo Bielsa –actual técnico del Athletic de Bilbao-, a quien conoce de Vélez Sársfield, y también habló con gente del Real Madrid y del Barcelona catalán. ¿Cuál es la posibilidad real de que regrese a Guayaquil? Alta, más allá de su prudencia.

“Vamos a esperar que se contacten conmigo y veremos. Siempre es una posibilidad atractiva dirigir un club como el Barcelona, pero también es una realidad que cuando uno deja su país hay un montón de cuestiones que uno debe evaluar, como por ejemplo la familia”.

Esto significa, en otras palabras, que el entrenador argentino espera una oferta atractiva también desde lo económico. Tanto sea que lleve a su familia consigo en plan gitano, como que la deje en Buenos Aires, ambas son cuestiones que tienen su precio.

Sobre todo porque, luego de meses de cierta tranquilidad, ahora, al interés del Barcelona se suma el de Godoy Cruz –el club que le dio notoriedad como técnico-, disconforme con la campaña de su DT, Nery Pumpido. Asad espera. Antonio Noboa, el presidente del Barcelona, es el que tiene la palabra.

Por la mañana en la cuenta  de Twitter @omarandresasad, en cuya biografía se indicaba que era la cuenta oficial del adiestrador, éste afirmaba que su vinculación con Barcelona era un hecho, pero hasta el cierre de esta edición, en contacto directo con el DT, éste indicaba lo contrario: “Soy un negado con la tecnología, no sé ni cómo abrir un Twitter”.