Jami: “Aproveché mi mejor arma, el remate”
“Había planificado, así como el año pasado, competir en el Nacional de Cross Country. A partir de diciembre me mentalicé en la prueba; dentro de mi programa de 2015, estaba ganar otra vez este título.
Hasta una semana antes corrí en asfalto, no hice ningún otro tipo de trabajo especial. Incluso, en Salinas, un día antes, salía por la mañana a correr en el malecón.
Me acoplé rápido al clima en este balneario de Santa Elena, que para suerte mía me brindó una mañana nublada, sin sol. Aplaudo que también los organizadores hayan hecho el programa a las 07:00.
Desde mi largada en la pista atlética de la Escuela Superior Militar de Aviación Cosme Rennella, hasta los últimos 20 metros de la meta, siempre me mantuve en el segundo puesto. Había atletas que son mucho más rápidos que yo, y tenía que cuidarme; la cuestión era clasificar al Panamericano de Cross Country a realizarse en Medellín (Colombia).
Como sabía que los 2 primeros en llegar a la meta iban a ser los que representarían al país en la cita internacional el 19 de febrero, nunca me desesperé por liderar el pelotón.
Dejé que mi compañero imbabureño, César Pilaluisa, comande toda la carrera. Él puso el paso con otros corredores de Cuenca, manteniendo un buen ritmo. En total eran 6 vueltas, yo intenté escaparme en la penúltima, pero este pelotón aceleró y no me dejó; en ese momento mantuvimos el ritmo.
Confieso que hubo un rato en que yo no sabía qué hacer. No es que me encontraba cansado, pienso que a lo mejor, por mi contextura (delgada), mi cuerpo sintió un poco de nerviosismo y desesperación. Se me nubló la mente y por unos segundos pensé en mantenerme y tratar de rematar en los últimos metros.
Nunca, en los 39 minutos que se me hicieron en la prueba, planifiqué una estrategia. Lo único que sabía es que debía mantenerme pegado a Pilaluisa y arriesgar en los últimos metros para pelear el primer lugar.
Atrás mío, casi pisándome los talones, estaba el cuencano Christian Salvador. Ya cuando faltaban poco más de 12 metros confié en mi remate y me arriesgué.
Tomé aliento y aceleré. Pilaluisa, al parecer, ya sentía las piernas pesadas; Salvador no quería que yo me desprendiera y también remató.
Pensaba que Salvador terminaría segundo por la intensidad que puso en la recta final. Pero al parecer Pilaluisa no se dejó y defendió, luego de que lo pasé yo, su segundo lugar y la clasificación al Panamericano.
La carrera fue exigente. Hizo que sacara lo mejor de mí, pero es bueno, ya que me obliga a seguir mejorando porque cada vez salen más y buenos corredores. Creo que mi desventaja es no ser tan rápido, al inicio de las carreras, como muchos otros.
Por lo pronto me prepararé para mi próximo evento, que será en asfalto. Correré el 1 de febrero en la ciudad de Cuenca, en la tradicional ‘10K’ de San Blas.
Todos vamos a ir a esa prueba; la primera del año para quienes hemos sido y somos seleccionados de atletismo por Ecuador. Hasta este momento confirmaron su presencia Bayron Piedra, Miguel Almachi, entre otros... Vamos a ver quién está mejor; de seguro pelearemos por el primer lugar”.