Dmitri Chliakhtine fue elegido el viernes por unanimidad presidente de la Federación Rusa de Atletismo (ARAF), con el objetivo de restaurar su imagen y tranquilizar a la AMA y a la IAAF, cuando los atletas de este país corren el riesgo de no participar en los Juegos 2016.

Alto responsable de deportes en la región de Samara, Chliakhtine fue respaldado por el ministro de Deportes Vitali Moutko y fue elegido por unanimidad; los otros aspirantes retiraron sus candidaturas.

El nuevo presidente será el escudo ‘anticrisis’ de la institución en los próximos meses, antes de que se celebre una nueva elección en septiembre u octubre, después de los Juegos 2016 de Río, señaló Moutko antes de la votación.

El antiguo presidente de la ARAF, Valentin Balakhnitchev, dimitió en diciembre, después del informe de la Agencia Mundial Antidopaje en el que se desveló un sistema de “dopaje organizado” en Rusia. Fue suspendido por la Federación Internacional de Atletismo la semana pasada. La publicación de este informe, provocó un enorme escándalo y la suspensión del laboratorio antidopaje de Moscú.

El 13 de noviembre, el consejo de la IAAF -gobierno de la instancia-, anunció la suspensión provisional de Rusia de todas las competiciones de atletismo, una sanción que afecta a 4 mil atletas y que podría comprometer la participación del equipo en los Juegos de Río 2016. (I)