Publicidad

Ecuador, 01 de Octubre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Poniatowska: “Vamos a seguir protestando”

Poniatowska: “Vamos a seguir protestando”
08 de diciembre de 2014 - 00:00

Son las últimas horas de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara. Elena Poniatowska llega a su conferencia estelar acompañada por un grupo de personas. Enseguida se nota el nerviosismo de los organizadores pero ella deja en claro cuál es su postura: “Vienen conmigo y van a subir conmigo”.

Se llena el auditorio para el evento ‘Una hora con la Poni’, según el programa, un diálogo del público con la ganadora del Premio Cervantes 2013. Sin embargo Elena, una de las escritoras más reconocidas y respetadas de Iberoamérica, cambia el libreto.

Sube al escenario, toma el micrófono y dice: “Va a suceder algo que tengo muy cerca del corazón. Es muy importante para mí y un gran honor porque han venido 5 personas de Ayotzinapa especialmente para estar con nosotros. Para dialogar. Para que ustedes les hagan preguntas y para que entre todos sepamos, tengamos la certeza de que vamos a sacar adelante a este país”.

Llama entonces a sus 5 acompañantes, que aguardaban en la primera fila. Se acercan el normalista Uriel Alonso Solís, sobreviviente de la noche del 26 de septiembre en Iguala; Eleutaquio Ortega, padre del desaparecido Mauricio Ortega; Óscar García, hermano del desaparecido Abel García; y Ulises Gutiérrez, hermano de Aldo Gutiérrez Solano, estudiante de 19 años quien recibió un balazo en el cráneo durante los ataques y está en coma desde entonces.

Entre aplausos comienzan el conteo que retumba en todo México por estos días. “Uno, dos, tres, cuatro…” así hasta 43 y después el grito unánime de “¡Justicia!”. Los organizadores piden a los familiares abandonar el escenario e interviene una funcionaria del evento. Llega el turno de Elena Poniatowska, quien nuevamente llama a los familiares y estudiantes porque ellos, dice, son los importantes. Les pide que comiencen a hablar, cediéndoles su espacio de conferencia estelar.

“Mi hermano (Abel) con tanta ilusión vino a estudiar a esa escuela normal porque es la escuela para nosotros los pobres. Vino a estudiar para ser un maestro bilingüe. Nosotros hablamos un idioma que se llama mixteco y mi mamá no puede hablar el español, por eso no puede andar con nosotros buscando”, dice Óscar García con su voz quebrándose. “Y cómo me duele que mi mamá siempre me pregunte ‘m’hijo, ¿qué sabes de tu hermano?’ Y a mí me duele mucho decirle ‘nada mamá, no sabemos nada’”. Llora. “A mi hermano lo extraño mucho. No he parado de buscarlo desde que se lo llevaron. No hemos parado de buscar a los 43 normalistas”. Se le acaban las palabras.

Ulises Gutiérrez exige atención especializada para su hermano, el muchacho que se debate entre la vida y la muerte desde hace más de 2 meses. “Lo queremos ver como era antes. Él tenía sueños. Quería estudiar; quería ser un profesionista; quería tener un futuro ¿y quiénes le trozaron ese futuro que tanto deseaba? Los policías, el gobierno”.

Uriel Alonso relata la negra noche del 26 de septiembre y detalla que entre las balaceras llamó por teléfono a un familiar que trabaja en el batallón militar de Iguala. “Desgraciadamente no puedo hacer nada primo. El general nos dijo que les vale madre”, fue la respuesta que recibió. Acusa al Ejército mexicano por complicidad y cuenta: “Cuando a un compañero le dieron el balazo en la boca no nos permitieron ni nos quisieron atender; le dijeron que aguantara si de verdad era hombre. Mi compañero se estaba muriendo”.

Desde la Feria Internacional del Libro, minutos antes de que en la capital del país, los normalistas informan que los expertos Equipo Argentino de Antropología Forense identificaron restos pertenecientes a Alexander Mora Venancio, uno de los 43 estudiantes desaparecidos. El examen genético, explican, dio positivo con un fragmento de hueso que habría sido encontrado en Cocula, municipio vecino a Iguala. El silencio invade la sala y entonces Uriel Alonso marca el camino “a nuestros compañeros caídos no los lloraremos, los sembraremos para que florezca la libertad”.           

Las preguntas y respuestas se destinan a conocer de primera mano el caso de represión en contra de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa. Pero enseguida las opiniones del público unen pasado y presente; se habla de las desapariciones forzadas que en México se acumulan desde 1969,  en su mayoría impunes.

Elena Poniatowska conduce el final: “Vamos a seguir participando. Vamos a seguir ayudando, vamos a seguir protestando. Antes de irnos les quiero dar las gracias porque nos escucharon y vamos a hacer un conteo para recordar a cada uno de ellos. No olvidemos que podrían ser nuestros hijos, nuestros hermanos, nuestros familiares”.

Con su voz aguda empieza a evocarlos y los asistentes, que no se han movido de sus asientos, suman voces. “Uno, dos, tres cuatro…43. ¡Justicia!”. 

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media