Los ecos de la crisis se oyen en la Feria del Libro de Fráncfort
Los ecos de la crisis en Europa y las medidas que están tomando los países principalmente afectados se sienten en la Feria del Libro de Fráncfort, sobre todo cuando se habla con editores provenientes de Grecia y Portugal.
Cuando los editores hablan entre ellos, lo hacen de los problemas concretos con gran claridad. "Los portugueses cada vez que vienen nos cuentan lo que está pasando", decía un editor español.
Medidas aprobadas o en estudio en esos países, como al aumento del IVA para algunos servicios y productos, así como la supresión o reducción de la paga extraordinaria son cosas que, se teme, afectarán al mercado navideño y, con ello, al mundo del libro que suele tener en diciembre uno de los mejores meses.
Sin embargo, cuando hablan con periodistas, los editores y responsables de los expositores son un poco más reservados y se refugian en la relación entre la crisis y la producción literaria y editorial.
"No hay ninguna novela actual en la que la crisis actual no desempeñe algún papel", dijo, por ejemplo, Socrates Kabouropoulos, el responsable de los libros de la editorial griega Ekebi en Fráncfort a un periodista del diario "Frankfurter Allgemeine".
El ejemplo habitual suele ser Petros Markaris que desde hace años tiene la mirada puesta en los problemas de la sociedad griega en sus novelas policiacas.
Markaris de alguna manera vio venir la crisis y la predijo con amargura. Otro ejemplo citado con frecuencia es el de Nikos Pajanopoulos que, en clave de ciencia ficción, hace una caricatura de la ideología neoliberal.
Las ventas en Grecia han bajado en torno al 10 % y eso el algo que naturalmente no alegra al sector pero, al menos públicamente, algunos como Kaboropoulos tratan de ver la parte positiva a la situación y sostienen que la crisis también tiene su lado bueno puesto que obliga a los griegos a reflexionar sobre sí mismos.