Y la cuenta continúa: 7 Grandes Premios disputados y 7 ganadores diferentes de 5 escuderías distintas, un hecho inédito en la historia de la Fórmula 1 durante el inicio de una temporada. Ahora el turno le tocó a Lewis Hamilton al imponerse de manera categórica en lo que fue la 7ma fecha del Campeonato Mundial de F1, el Gran Premio de Canadá disputado el pasado 10 de junio en el difícil trazado Gilles Villenueve; una victoria por demás esperada para el campeón 2008 ya que, siendo uno de los mejores pilotos del paquete, sin duda que su nombre faltaba en la “extensa” lista de ganadores en este comienzo de campeonato, y qué mejor que lograrlo en el trazado que lo vio triunfar por primera vez en F1, en 2007.
Por el lado de Hamilton podríamos decir que tenerlo nuevamente como ganador no es sorprendente, pero lo que de alguna manera sí lo fue es tener en el podio a Romain Grosjean y a Sergio “Checo” Pérez 2do. y 3ro., respectivamente, luego de que Grosjean arrancó desde la 7ma. plaza en la grilla de partida y Pérez desde la 15ta.
En condiciones normales, el podio debía estar compartido entre el propio Hamilton, Fernando Alonso (con un Ferrari en notable progreso) y Sebastián Vettel, quienes se “dispararon” al frente desde el arranque, pero como ya es costumbre, la degradación de los neumáticos volvió a jugar un rol protagónico en el resultado final de la carrera: Los 3 mencionados pilotos arrancaron con el mismo compuesto de llanta (el más blando), por consecuencia con la misma estrategia de pits, es decir 2 paradas planificadas. No obstante, mientras Hamilton respetó “al pie de la letra” dicha planificación, tanto Alonso como Vettel cambiaron de parecer sobre la marcha intentando ir hasta el final con un solo cambio de llantas para así pensar en la victoria, y de hecho, teóricamente, la idea fue buena pues mientras Lewis se detenía, Fernando y Sebastián se alejaban adelante 1ero. y 2do. Desafortunadamente, la apuesta no funcionó; con llantas frescas Hamilton se volvió hasta 4 segundos más rápido por vuelta que los otros dos, por consiguiente le tomó pocas vueltas volver a alcanzar a sus rivales por la victoria para pasarlos con extrema facilidad y recuperar así la punta, la cual mantendría hasta la bandera a cuadros. De hecho, el fracaso de la estrategia fue tal que a 6 vueltas del final, Vettel decidió entrar a pits para siempre cambiar sus llantas a diferencia de Alonso, quien prefirió quedarse en pista con los neumáticos prácticamente en “lonas”, lo cual le hizo caer del 2do. al 5to. puesto final, incluso, superado en la última vuelta por el propio Vettel.
Pero increíblemente hubo un 3er. piloto que pensó de esa forma y también decidió mantenerse con el mismo juego de llantas desde el primer cambio hasta el final: Me refiero a Romain Grosjean, que a diferencia del Ferrari y del Red Bull tuvo en su Lotus un chasis que castigó mucho menos las llantas que en el caso del piloto francés sí aguantaron hasta el final, siendo del mismo compuesto que las que llevaban Alonso y Vettel. ¿La razón? Como digo, un auto un poco más lento pero más “generoso” en el trato sobre los neumáticos y seguramente, debido también a una conducción más prolija por parte de Grosjean pensando justamente en cuidarlos, pues no olvidemos que entre Hamilton, Alonso y Vettel, la “guerra” por el 1er. puesto era “sin cuartel” desde el mismísimo arranque, por lo tanto difícil pensar en ser conservadores en la conducción.
Esto le permitió entonces a Grosjean lograr un extraordinario a más de sorpresivo 2do. puesto con lo cual Romain se convirtió en el primer francés en 17 años luego de la victoria (la única en F1) de Jean Alési, en 1995. Y excelente también el 3er. lugar de Pérez, pero en el caso del mexicano de Sauber, él si arrancó la carrera pensando siempre en detenerse una sola vez en pits a cambiar de llantas, puesto que partió con los neumáticos de compuesto más duro para montar los suaves en la parte final de la competencia, estrategia que le funcionó perfectamente, a diferencia de Kimi Raikkonen, por ejemplo, que planificó lo mismo, pero que no le funcionó del todo, ya que apenas pudo ser 8vo., situación preocupante para el finlandés campeón mundial 2007, que ve cómo su joven coequipero Grosjean poco a poco se muestra cada vez más rápido que él, sobre todo en clasificaciones.
Con el resultado de este Gran Premio canadiense, la punta del campeonato vuelve a modificarse con el propio Hamilton, liderándolo nuevamente, pero con solo 2 puntos más que Alonso, 3 más que Vettel, y 9 más que Webber, quien en Montreal no fue ni la sombra de lo que mostró en Mónaco, lo que le permitió llevarse una victoria por demás merecida.
La próxima fecha será este domingo, el Gran Premio de Europa, a disputarse en la ciudad de Valencia-España. ¿A quién apostarle? Hoy más que nunca, ¡qué difícil pregunta!