El primer avión aterrizó en el nuevo aeropuerto de Quito ubicado en Tababela. El 30 de marzo, la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) realizó las pruebas de verificación de radioayudas debido a que la terminal aérea empezará a operar el próximo 12 de octubre.              

El avión, un Beechcraft de propiedad del DGAC, con trece pasajeros a bordo, realizó varios aterrizajes en la pista con el fin de probar las radioayudas y calibrarlas.   

El resultado de la primera prueba es que la terminal aérea puede operar, explicó el gerente directo del DGAC, Fernando Guerrero, quien aclaró que todo aeropuerto tiene restricciones.

El avión, denominado como de laboratorio, realizará varias pruebas adicionales para probar el radar secundario, exclusivo del nuevo aeropuerto. Asimismo, se realizarán las evaluaciones con otros modelos de aeronaves y aviones de las aerolíneas que operarán en el lugar. American Airlines realizará las pruebas con un avión Boeing modelo 757.

Guerrero explicó que la nueva terminal aérea tiene la ventaja de contar con una pista que supera ampliamente  la del aeropuerto Mariscal Sucre, al alcanzar los 4.100 metros de largo, lo que permite que las naves tengan mayor facilidad para despegar, aterrizar y maniobrar, sobre todo las de mayor dimensión, como las de Iberia, porque el ancho de esta pista también es más amplio.