Los Salvajes Hermanos Brown tienen su historia con David y Mateo Valarezo, quienes siempre han compartido el gusto por el rock de los años sesenta, el blues y rock and roll. Pese a esto, jamás se imaginaron que la idea que surgió después de una guitarreada para conformar una banda musical, tuviera los resultados que han conseguido actualmente.

En octubre de 2006, ambos músicos quiteños escribieron ‘El circo de los hermanos Brown’, la canción que en un inicio le dio nombre al grupo y con la que comenzaron a promocionarse en los medios. “Nos nombramos así en egoría a los acostumbrados circos que visitan nuestro país y que llevan el apellido de sus dueños. Y elegimos Brown como evocación al blues y por ser un apellido representativo del género”, manifiestan los hermanos.

Para fortalecerse como banda se unió a ellos su primo Miguel, quien escribió parte de las letras y colabora en la percusión. Tras la búsqueda de un bajista, Mateo se comunicó con Ariel, un viejo amigo del colegio que acompañó al grupo en sus primeras presentaciones.

Este luego decidió marcharse para continuar con otros proyectos. Nuevos músicos entraron y salieron de la banda, hasta que realizaron varios castings para encontrar a un bajista y un baterista. “En ese entonces me comuniqué con José Vite, un excompañero del colegio que nos demostró que se desenvolvía muy bien en la batería y que, incluso, aportó con mejoras en el estilo de la banda”, recuerda Mateo.

La búsqueda del bajista terminó cuando se integró al proyecto Jorge Burbano, quien durante una reunión empezó a tocar el bajo y al demostrar su destreza con el instrumento fue requerido para consolidar la alineación de la agrupación, llegando con su música no solo en la escena quiteña, sino también a otras ciudades como Guayaquil, Ambato y Guaranda.

Aunque José y Jorge se unieron por un tiempo a la banda (actualmente ya no forman parte de esta), ambos fueron reemplazados por Daniel Baca (batería) y Omar Sánchez (bajo). Estos dos músicos son quienes ahora se mantienen junto a Mateo, David y Miguel, los compositores del grupo y quienes modificaron el nombre de la banda como Los Salvajes Hermanos Brown, refiriéndose a la actitud contestaría y al estilo musical que presentan de manera continua, según indican.

Trabajos musicales

‘Como perros furiosos’ se titula el primer EP que sacaron al mercado y que incluye las canciones como ‘Perro furioso’, ‘Sin vergüenza’, ‘Cuántos son’, y otras. “Ahora nuestro principal objetivo es lanzar un álbum que contenga los mejores temas dentro de una veintena de canciones compuestas durante los años de trayectoria de la banda y que se reforzaron con la llegada de Omar, un bajista realmente virtuoso y con cualidades también en el canto, y el ingreso de Daniel en la batería, en el 2011.

Él supo, además de hallar un estilo ecléctico, se destaca como violinista”, dijo Mateo, amigo de la infancia y compañero en otros proyectos musicales de Daniel. Una vez que el quinteto sintió que se proyectaba al público con un estilo propio, hace un año comenzó con la producción del disco ‘El desfile de las calaveras’. “Ya terminamos de grabar los temas y estamos en la etapa de masterización.

Esperamos presentar el disco en marzo”, indicaron los músicos y aclararon que sus composiciones abarcan distintas temáticas, como la desigualdad laboral, letras en contra del racismo, historias que cuentan la vida de personajes conflictivos o quienes ven la vida de forma positiva.

Vídeo debut

A finales del 2012 la agrupación dio a conocer a través de las redes sociales su primer vídeo, ‘Proxeneta del vicio’, una producción a cargo de los integrantes del grupo.

“Una de nuestras prioridades es que la banda llegue al público gráficamente, a través de colores, imágenes, estética y con buenos vídeos. Eso tratamos de mostrar en el clip de este tema, que critica al imperialismo y enfocamos al sistema internacional como un proxeneta que prostituye a la sociedad y las virtudes de las personas”, aclaran.

Tras concluir con la promoción de este audiovisual lanzarán ‘El desfile de calaveras’, canción que le da nombre al disco y que anuncian que sonará primero a través de las redes sociales antes de que ingrese a las radios ecuatorianas.

“La idea es que el disco se base en la tradición y folclor quiteño, por eso el tema ‘El desfile de calaveras’ es una reinterpretación del Padre Almeida, pero a su vez tiene un tinte psicológico que habla de la confrontación contra uno mismo y vencer los demonios que tenemos dentro”, concluyen.