El grito de las guías a las 7 de la mañana con el que era despertada -al igual que las demás reclusas-, para ‘La Contada’, así como el verse encerrada entre los oxidados barrotes de la cárcel de mujeres, a los que ella llama ‘circunstanciales’, desde hace algunos meses pasaron a ser para la española Laila Martin una parte de su pasado doloroso y amargo por recobrar su libertad tras tres años de encierro.

“Fue algo injusto, nunca me imaginé que me pasaría a mí. Pensé que solo ocurría en las películas. El peor error de mi vida fue dejar mi maleta para ir a preguntar por dónde era la salida, sin imaginar que al regresar me la revisarían para encontrar dentro de ella 20 kilos de droga. En ese instante el mundo se me derrumbó”.

Y de aquella experiencia, que -según Laila- si bien fue bastante sombría durante los primeros ocho meses, más tarde le permitió descubrir su vocación por la música y desarrollar un nuevo talento que tenía escondido, la pintura.

“Cuando conocí a Dios me di cuenta que uno tiene que pasar por una serie de vicisitudes y problemas para ver la vida de otra perspectiva. Todo eso me ayudó a escribir temas propios y sentidos que antes no tenía, pero a raíz de esto he compuesto canciones profundas”.

Una de ellas es ‘La Contada’, que fue escrita en dos partes: “la primera es la más melancólica y triste, pues la escribí cuando estaba sumergida por la depresión y aquello me llevó a probar polvo fumado. La otra se dio en el momento cuando conocí a Dios y todo lo malo empezó a desaparecer”.

‘La Contada’ forma parte de su primer disco que pronto pondrá en el mercado. Otros de los temas que componen el material son ‘El ahí contigo’. “Este tema lo escribí pensando en cuando me tenga que regresar a España y uno se tiene que despedir de la gente que nos ha apoyado siempre”. ‘Querer ser feliz’, melodía que habla de las cosas positivas y negativas que se nos da en la vida; la esperanza y fe reflejan cómo el amor a veces nos decepciona; y ‘El final’, del que -dice- es un tema muy profundo de cuando uno se siente vacío, no crees tener alma y estás cansado de todo.

Este lo interpretó en una de las cadenas del presidente Rafael Correa, quien le regaló una guitarra. Además de las canciones inéditas, cuenta que quiso que su primer disco esté compuesto por sus favoritas ‘Si tú no estás’, de Rosana; “I will survive”, “I can´t take muy eyes off you”, de Gloria Gaynor y ‘Amiga fiel’, de Carole King.

De estas dos últimas comenta que siempre ha sentido una admiración por el timbre de sus voces. Al igual que ellas, otra que está entre sus referentes es Tina Turner. “Ella es mi dios musical, me encanta su puesta en escena, como cantante, como artista y como persona. Siempre me ha influenciado positivamente, desde que empecé a escucharla a los 18 años, aunque la descubrí tarde con ‘Whats love got to do with it’, surgió un amor a primera vista. Compré todos sus discos, su película y su libro”.

De hecho, dice que ese mismo fanatismo por ella la llevó -antes de llegar a Ecuador-, a grabar el tema ‘Simply the best’, al ritmo del house/dance. “Tuve la oportunidad de conocer a un productor, el DJ Agus que tenía pensado hacer un cover de ella y con quien coincide casualmente en un evento. Me comentó el proyecto y me interesó. Grabamos el tema y lo presentamos en la Sociedad de Autores, donde Universal Records lo incluyó en el disco estrella, un material muy conocido en el que colocan recopilatorios de los temas más famosos. Fue un honor y más cuando lo presentaron en los premios nacionales de Música Electrónica”.

Según Laila, lo que siempre ha disfrutado de su carrera musical, que empezó siendo una adolescente al tocar en bares interpretando canciones de Aretha Franklin y Stevie Wonder, es su versatilidad con los ritmos. Es por ello que para su disco decidió apostar por la fusión entre las baladas, lo latino y el rock.