“En un país de fábula vivía un viejo artista que en una flauta mágica tenía su caudal. Tan pobre y tan drástico era que el mísero flautista dormía en las copas de árboles. Y los pájaros de la selva lo venían a despertar...”, empieza así ‘La romanza de Marola’, una joven tabernera de algún puerto español. Esa es una de las piezas que la soprano guayaquileña Johanna Mosquera Ganda practica desde hace tres meses en Ecuaprolírica, institución que organiza su noche de zarzuela el próximo 19 y 20 de julio.

“En escena estarán más de 50 artistas entre solistas, coristas manabitas y actores, además de bailarines. Parece fácil hacer zarzuela, pero no lo es. Para escoger las voces se convocó a audiciones por medio de los medios de comunicación y del Facebook de Ecuaprolírica. Analizamos quiénes podían ser tales personajes, algunos de los participantes iban específicamente para ciertos roles mientras que otros solo decían que aplicaban para el que saliera”, mencionó la soprano.

Sobre este género, Mosquera sostuvo que será un espectáculo que tendrá dos funciones: el sábado 19 de julio a las 20:00 y el domingo 20 de julio a las 18:00 en la Sala Experimental del Teatro Centro de Arte. Las entradas costarán $ 15 y se las puede adquirir en la boletería del teatro o por el Facebook de Ecuaprolírica.

“La zarzuela es una forma de música teatral o género musical escénico surgido en España que se distingue por contener partes instrumentales, vocales (solos, dúos, coros) y partes habladas, aunque existen excepciones en las que estas últimas están completamente ausentes”.

La primera pieza -según contó Mosquera- es el 2º acto de ‘La tabernera del puerto’ que es el más representativo, tiene los números musicales más conocidos y participan todas las voces mientras la segunda parte es un solo acto titulado ‘La Gran Vía’, una obra más de fantasía y cómica donde las calles salen a protestar porque van a construir una nueva calle y a las demás las tienen olvidadas. Esa obra la realizaron en 2001, pero a nivel colegial. Mosquera explicó que las personas que aplican para un personaje deben cumplir ciertas características dependiendo si canta, en las pruebas veían si iba mejor en la actuación o en la lírica, es decir, hacían que cante y/o interprete un rol.

Yendo al pasado, la cantante lírica recordó que sus pininos los hizo en el colegio cuando su profesor de música la llevó a ella y a sus compañeras de salón para ver la zarzuela ‘Luisa Fernanda’, que después montaron para un acto especial en el colegio. En ese entonces Mosquera se consideraba tímida, así que al inicio no se animaba a representar el rol principal de esa pieza hasta que finalmente lo hizo. Fue en ese momento que encontró su vocación, aquella pasión que no puede dejar. Al salir del colegio ingresó a ‘Amigos de la lírica’; su primera obra dentro del grupo fue ‘La Revoltosa’. Asimismo, entró a estudiar con la cantante Beatriz Parra.

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