El "Cesare" carcelario de los Taviani ganó el Oso de Oro de una convulsa Berlinale
La veteranía de los hermanos Paolo y Vittorio Taviani se impuso en la Berlinale, que les dio su Oso de Oro por "Cesare deve morire", un impactante filme que traslada a Shakespeare a una cárcel de alta seguridad de Roma, en un festival de cine volcado a reflejar las convulsiones del mundo actual.
El jurado presidido por Mike Leigh se decantó por una lección de gran cine, interpretado por presos reales, desde narcotraficantes a camorristas, capaces de transportar a la Italia de hoy el complot contra el césar tirano.
Otros galardones se fueron para las nuevas generaciones, al frente de temas de alto voltaje político y, también, de un formato de cine duro, de bajo presupuesto y sin concesiones al espectador.
El cine latinoamericano tuvo su parcela en el palmarés a través de los premios logrados hoy por la uruguayo-mexicana "La demora", de Rodrigo Pla, la luso-brasileña "Tabú", de Miguel Gomes, y el corto "Loxoro", de la peruana Claudia Llosa, Oso de Oro 2009 con "La teta asustada".
La película del portugués Gomes, coproducción entre Brasil y Portugal, sí estaba en la sección a competición y obtuvo el premio Alfred Bauer, instituido en memoria del fundador del festival, y el de la crítica internacional FIPRESCI.