Estudiantes y docentes tendrán una agenda distinta a partir de hoy y hasta el 12 de febrero, cuando inicia el periodo de vacaciones correspondiente al término del primer quimestre en la Sierra y Amazonía.

Los estudiantes podrán descansar, pero los docentes deberán acudir a los distintos centros educativos tanto fiscales, como particulares y municipales, hasta el miércoles cinco de febrero. Este periodo les servirá para registrar las calificaciones, evaluar los resultados obtenidos en cada materia y planificar el siguiente quimestre.

Según maestros consultados por este diario, la mayor debilidad de los estudiantes está en la materia de Matemáticas, seguida por Lenguaje, en la que varios han alcanzado la nota mínima de 7. Ese es el problema recurrente, dicen, desde la educación básica hasta el bachillerato.

“Hay niños que son muy pilas con los números y aprenden fácilmente, pero a otros les cuesta, por lo que hay que repetir y hasta reforzar las clases”, manifestó una profesora de primaria que prefirió mantener su nombre en reserva.

Con la finalidad de reforzar los conocimientos, se había anunciado que los alumnos debían tener un periodo de clases extracurriculares luego de las vacaciones. Esto no ocurrirá puesto que a lo largo de estos cinco meses, los docentes aprovecharon las dos horas adicionales tras la jornada escolar, para fortalecer la enseñanza.

“Lo importante es que la materia se aprenda correctamente. A veces incluso hay que repetir la clase porque no todos captan con la misma rapidez y en eso los maestros somos muy conscientes”, acotó Gloria, otra docente de Estudios Sociales.

Es el segundo año que el Ministerio de Educación aplica en el régimen Sierra y Amazonía la modalidad de quimestres.

Según la Cartera de Estado, la aplicación de esta modalidad sirve para mejorar la calidad educativa.

A varios estudiantes los quimestres les permiten planificar mejor el periodo escolar y de descanso. “Me agrada tener un tiempo largo de vacaciones intermedias porque así puedo tener un respiro a las obligaciones diarias y hasta retornar con mayor energía”, indicó Salomé Díaz, alumna del noveno año.

Ayer, en el último día de clases, los estudiantes aprovecharon para conversar con los profesores y solicitar literatura adicional para continuar con el fortalecimiento de las materias en el hogar.