Servicio de transporte mejoró tras alza de tarifa
Marcela Tipán vive en el barrio Zumbalica, localizado al noroccidente de Latacunga. A diario tiene que viajar en autobús hasta una farmacia del centro de la ciudad, donde es dependiente. La mujer reconoce que sí hubo cambios positivos tras el incremento del pasaje del transporte público de $ 0.25 a $ 0.30, el 12 de julio del 2016.
La subida de valor del servicio se dio tras las gestiones desarrolladas por las cooperativas Citibus y Sultana del Cotopaxi, que operan en Latacunga. Así nació una ordenanza en la que se explica que dicha alza se aprobó para cubrir los gastos del sector transportista.
“Tras casi un año del incremento del valor hemos podido afrontar, en parte, el mantenimiento de los buses”, dijo Celso Panchi, jefe de operaciones de la compañía Citibus.
A más de esto destacó que para establecer el alza se realizó un estudio de rutas, gastos de mantenimiento, sueldos de conductores, entre otros y se determinó que el pasaje urbano debería costar entre $ 0.35 y $ 0.47.
Al final el servicio se estableció en $ 0.30 a fin de no causar afectaciones económicas a los usuarios. Los latacungueños no se opusieron al incremento, siempre y cuando los profesionales del volante mejoraran el trato al usuario y las unidades.
Nancy Herrera, usuaria, manifestó que los autobuses fueron dotados de puertas de carga y descarga. También aumentaron su número, con lo que la demanda dejó de ser caótica, salvo en horas pico en la ruta Latacunga – San Felipe – Universidad Técnica de Cotopaxi (UTC).
Según Geovanny Quishpe, presidente de la cooperativa Sultana del Cotopaxi, estas mejoras se realizaron cabalmente. Explicó que las 60 unidades que integran el gremio al que representa están en buen estado y su antigüedad es de máximo 15 años. El trato al usuario mejoró también, gracias a charlas y talleres dictados por especialistas.
En el caso de Citibus, esto se realizó en coordinación con la empresa privada y Sultana del Cotopaxi, de modo interno. Ambas cooperativas realizaron entre tres y cuatro talleres en el último año.
En estos aprendieron a relacionarse con el usuario de modo amigable y generar empatía. Sin embargo cada empresa recibió en promedio cinco denuncias escritas por mal trato en el año, por lo que los dirigentes aplican correctivos. (I)