Tres negocios le ponen sabor al sector de ‘La Vencedores’
Doña Clemencia (47 años) se ubica con su negocio de carne asada y menestras en la intersección de las avenidas Mariscal Sucre y Vencedores del Pichincha (al sur de Quito).
La mujer nos contó que cuando tenía 20 años empezó con la venta nocturna de comida y que disfruta de esa labor, que heredó de sus padres. “Para qué mentirle, ahora me va mejor que al principio. Conozco a la mayoría de clientes, pues casi todos son mis vecinos”, afirma.
Ambateña de nacimiento y corazón, al principio le costó trabajo acostumbrarse a los quiteños y ganar clientes.
Marco (68) es otra persona que se dedica a la venta de comida en el sur de la ciudad. Ofrece a sus clientes morocho y empanadas de viento en su negocio bautizado RDT (Rico, delicioso, tradicional).
El hombre aseguró que, contrariamente a lo que podría pensarse, la mayoría de sus clientes “son muchachos que vienen con sus novias, jóvenes trabajadores que llegan para calentarse con lo que les sirvo”.
Parte de su estrategia de venta son los precios: $ 1 cuesta el vaso de morocho y $ 1,50 la bebida acompañada de la empanada.
Carmen es una muchacha nacida en la ciudad de Otavalo (Imbabura) que ayuda a sus padres en su negocio, ubicado también en el sector La Magdalena.
Lo hace cuando puede, pues está a punto de terminar el bachillerato en el Colegio Manuela Cañizares.
Confesó que cuando llegó a Quito le costó acostumbrarse al ritmo de la ciudad.
Pero ahora, los fines de semana y feriados Carmen se encarga de preparar y vender la fritada, las hamburguesas y las salchipapas que se ofrece en el negocio.
La aceptación es tal, que los clientes han apodado a la muchacha como ‘la pequeña cocinera’.
Carmen dice que el gusto que le pone a su labor es el “ingrediente secreto” para conquistar a sus clientes.
Cuando vaya por el sur, no se olvide de visitar estos negocios.