Ruta Collas ha elevado la plusvalía de sector aledaño
La Ruta Collas - Aeropuerto, otra de las vías que se construyen para ingresar a la nueva terminal aérea de Quito, en Tababela, tiene un avance del 21%, y según el Ministerio de Transporte estará operando en abril de 2014.
El presidente de la Cámara de Construcción de Quito, Hermel Flores, estima que subirá la plusvalía de la zona cuando el aeropuerto empiece a operar -el 12 de octubre próximo- y “desde ya conocemos que la gente no quiere vender los lotes para aumentar su precio”.
En las páginas web que comercializan lotes e inmuebles ya revelan ese fenómeno. Por ejemplo, algunos terrenos se ofertan en 28.000 dólares por hectárea, poniendo en énfasis que está ubicado cerca del nuevo aeropuerto. En el mismo portal web se ofrece una propiedad de 7,2 hectáreas en un millón de dólares.
Según Flores, los inmuebles en la zona seguirán subiendo de precio conforme las estructuras del aeropuerto en Tababela sigan avanzando. Agregó además que este fenómeno ocurre en todos los sectores.
El acceso a la ruta Collas será por la Panamericana Norte, dos kilómetros después del peaje de Oyacoto, desde donde el recorrido hacia el nuevo aeropuerto durará alrededor de 10 minutos. La ventaja de la vía es que se une al conector Alpachaca dentro del aeropuerto y esta a su vez con las rutas E35 (para transporte de carga) e Interoceánica. “Esta infraestructura vial y la ruta Viva conforman un verdadero eje perimetral de la ciudad”, indicó el alcalde Augusto Barrera.
En el sector también se construirá un puente de 320 metros de largo sobre el río Guayllabamba, en dirección hacia la meseta de Tababela hasta el terminal de pasajeros. Según las autoridades encargadas de la obra, se trata de un enorme proyecto porque la estructura del puente estará sostenida por columnas de hasta 200 metros de altura que se sujetarán por cables.
Marcelo Herdoíza, gerente de Panavial -empresa a cargo de la construcción de la ruta-, explicó que los trabajadores comenzaron las perforaciones cerca del río Guayllabamba para verificar la firmeza del suelo. La construcción del puente empezará en febrero del próximo año.
En la obra colaborarán alrededor de 800 empleados directos y 2.000 de manera indirecta, quienes estarán a cargo de subcontratistas en el abastecimiento de materiales para el proyecto.
Construcción de la nueva ruta llevará servicios a barrios
El barrio Santa Anita de Calderón Segunda Etapa, ubicado a un costado de la entrada a la ruta Collas, tiene más de 10 años de creación y todavía no cuenta con el servicio de agua potable permanente.
Los moradores de la zona cuentan que la energía eléctrica que reciben es de baja potencia porque comparten un medidor para varias viviendas. También carecen de alcantarillado y de vías asfaltadas, por lo que a diario conviven con las nubes de polvo.
A esas condiciones se suman las extensas polvaredas que se originan en el área donde se construye la ruta Collas, lo que afecta a los vecinos del sector.
El lugar es seco y hay “mucho polvo, pero desde que se inició la obra las nubes de polvo entran a nuestras viviendas y afecta nuestra salud”, contó Marcela Ruiz (37 años).
Con ella coincide María Rea (64 años), quien dice que si bien aquellos trabajos causan malestar, también es importante señalar que al estar junto a la vía de acceso al nuevo aeropuerto su localidad también se beneficiará de obras y mejorarán las condiciones de vida de su familia y vecinos. Con ello también mejorará la plusvalía en el sector.