Los reclamos de los vendedores reubicados en el Centro de Comercio construido en el sector del Comité del Pueblo (nororiente de Quito) no cesan.

El espacio abrió sus puertas el 14 de noviembre de 2015 y desde entonces las quejas se han multiplicado. El ex coordinador distrital de comercio, Marco Morillo, incluso tuvo que acudir el 16 de diciembre para aplacar las protestas.

La principal queja tiene que ver con la reducción de las ventas. Según los comerciantes, su nivel de negocio ha bajado alrededor del 50% desde que se trasladaron de las veredas de la avenida Jorge Garcés hasta los locales actuales.

No obstante, esa no es su única preocupación. EL TELÉGRAFO recorrió el lugar y evidenció el estado en que se encuentran tanto la edificación como los vendedores.

Al ingresar por la puerta de la calle César Endara el piso se encontraba sucio. Lo mismo en el primer nivel de la edificación; además, varios puestos aún estaban cerrados pasadas las 09:30.

El comentario de los comerciantes fue que algunas personas prefieren “no perder tiempo, debido a las bajas ventas”.

En la segunda planta los productos cárnicos emanaban mal olor, lo que ocurre, de acuerdo con los vendedores, por falta de ventilación y la carencia de infraestructura necesaria para conservar los productos.

En el área dedicada a la venta de frutas y verduras varios puestos también se encontraban cerrados y   algunos exigían medidas de seguridad para sus locales.

Los ocupantes de la sección también dijeron que la mayoría de sus productos terminan en la basura, porque se pudren en los estantes ante la escasez de ventas.

En el cuarto piso el área de comidas preparadas tenía una de sus gradas eléctricas en reparación, después de un mes de funcionamiento. El lugar tampoco estaba completamente limpio y el olor de la comida se encierra.

Los presidentes de las asociaciones de comerciantes (18 de Agosto, 2 de Junio y Pachakutik) señalan que los reclamos a la administración del Centro de Comercio y al Cabildo son recurrentes y las respuestas escasas.

La dirigente Jenny Cruz mencionó que los comerciantes piden reiterativamente soluciones al Cabildo, pues requieren de una mejor y mayor publicidad para atraer clientes, el mejoramiento de las instalaciones y la instalación de locales ancla.

Sobre esto último, la Agencia de Coordinación Distrital de Comercio ofreció que se instalarían cajeros automáticos, farmacias, un local de Servientrega, entre otros negocios que atraigan clientes. Hasta ahora, solo un local de la cadena Farmacias Económicas atiende en el sitio.

Myriam Argüello, administradora del espacio, responsabilizó de los problemas a los comerciantes. Mencionó que, por ejemplo, no cumplen con los horarios de atención, lo que causa -a su juicio- el alejamiento de los potenciales clientes.

Cuando aún estaba en funciones Morillo, señaló que el tema de la limpieza era una cuestión de los comerciantes, aunque comprometía el apoyo del Cabildo.

Sobre los locales ancla, el exfuncionario apuntó que su instalación requiere tiempo, sobre todo de los bancarios, por la necesidad de permisos como los de la Superintendencia de Bancos.

En cuanto al modelo de gestión, Argüello señaló que ya está elaborado. Pero los comerciantes comentaron que en este no se han integrado sus ideas, puesto que el Municipio no les invitó a participar en la elaboración del mismo.

En el ámbito de la reubicación, una de las deudas pendientes de la actual Alcaldía capitalina es la conclusión de la Plaza Comercial Michelena, a donde se prevé trasladar a los vendedores que hoy ocupan las veredas de la avenida de ese nombre, ubicada en el sur de Quito.

El espacio se encuentra abandonado por alrededor de 2 años. Ello ha generado que, por momentos, el espacio sea utilizado por mendigos y para el consumo de alcohol y drogas.

Voceros de la Administración Zonal Eloy Alfaro indicaron que el proyecto se encuentra en licitación, a pesar de que en febrero de 2015 habían anunciado que los trabajos se retomarían en julio de ese año y que a finales del mismo período estaría concluido.

Al llegar julio, funcionarios de la dependencia municipal señalaron que los estudios técnicos para reestructurar el proyecto, que habría tenido fallas, habían concluido y que el llamado para la continuación de la construcción del sitio estaba en el Portal de Compras Públicas.

Uno de los argumentos para la tardanza es que debieron resolverse problemas jurídicos.

Para este año el Municipio contempla la rehabilitación del Centro de Comercio del Comité del Pueblo, con lo que se solucionarían las fallas denunciadas por sus ocupantes; pero no se prevé la continuación de la edificación de la Plaza Comercial La Michelena. (I)