La Empresa Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (EPMMOP) instaló semáforos adaptativos (inteligentes) en el sector de El Trébol (centro-oriente).

En ese sitio, de alto tráfico vehicular, se  colocaron 32 cabezas de semáforos vehiculares, 14 cabezas de semáforos peatonales, 4 reguladores de tráfico, 14 báculos y 16 columnas. Los semáforos se activan de acuerdo con el flujo de automotores y personas que se presente en el redondel.

Los nuevos aparatos y los otros dispositivos instalados se integran en el proyecto de semaforización centralizado adaptativo, que se administra y monitorea desde el Centro de Gestión de la Movilidad, localizado junto al Parque Inglés, en el barrio San Carlos.

El nuevo esquema pretende disminuir los conflictos de tráfico en las vías que confluyen en El Trébol, con el fin de brindar garantías a los peatones que transitan por las intersecciones semaforizadas, donde se establecieron semáforos peatonales que registran el tiempo faltante en forma regresiva para el cruce.

Adicionalmente, los vehículos de transporte público atraviesan el sector circulan únicamente por el redondel. Esto facilita el tránsito de los vehículos livianos por la avenida Velasco Ibarra y el puente que conecta a la autopista general Rumiñahui con La Marín.

Por El Trébol se movilizan 25 operadoras de transporte público con 59 rutas, y 11 operadoras de transporte interparroquial, que se dirigen desde Quito al valle de Los Chillos o viceversa, mediante 12 rutas.

En el redondel de la zona están situadas varias paradas de integración  para el uso de personas provinientes del norte, centro y sur de la ciudad.

Las vías aledañas cuentan con señalización horizontal en una superficie de 1.161 m². Existen líneas canalizadoras de peatones, división de carriles, flechas de direccionamiento y 49 señales verticales preventivas y regulatorias. También hay 12 señales verticales informativas.

Diariamente, entre las 06:00 y las 21:30, por el área circulan 132.405 automotores. De esa cifra, 115.012 son vehículos livianos, 15.008 buses de transporte público y 2.385 vehículos, según cifras de la EPMMOP.

Entre los planes dejados en carpeta por la administración municipal de Augusto Barrera consta la rehabilitación y reorganización de ese sector, considerado como conflictivo por tratarse de un espacio que sirve de conexión entre el norte, centro, sur de Quito y el valle de Los Chillos.