En quito, 2.415 personas deben legalizar estatus
La sobreoferta de unidades preocupa a los transportistas
La entrega de 2.415 nuevas habilitaciones para el servicio de transporte escolar, por parte del Municipio de Quito, preocupa a la Federación de Transporte Escolar e Institucional del Ecuador (Fenatei).
Oswaldo Guamán, presidente de la organización, cree que hay una “sobreoferta de calificación y notificaciones favorables” por parte del Cabildo. Ayer, el Ayuntamiento entregó en el coliseo Los Quitus, las nuevas habilitaciones a los choferes de transporte escolar, quienes tendrán 180 días, para iniciar el proceso de legalización.
Guamán, quien representa a 48 operadoras (2.600 afiliados), de 64 que hay en la capital, dijo que estudios previos reflejaron la necesidad de incorporar al sistema 1.337 nuevas unidades y no 2.415.
El representante del transporte escolar dijo que al inicio del proceso se insistió en que la necesidad de cubrir la movilización para los colegiales “no se debe convertir en una oferta de campaña política”.
Por ello sostuvo que el alcalde de Quito, Mauricio Rodas, debe transparentar el proceso. “El alcalde debe decirles (a los transportistas) que esto es absolutamente gratuito, que fue abierto a todo el público, que reciben todos por igual, aunque creo que no, porque se entregaron otras habilitaciones antes”, reiteró Guzmán, refiriéndose a 915 notificaciones que otorgó en este mes el Municipio, según informó en un boletín de prensa.
Antes de que Rodas llegue, la espera provocó más de un abucheo por parte de los transportistas asistentes. Cuando el burgomaestre arribó al lugar con 2 horas de retraso, lo hizo saludando, mientras en altoparlantes se escuchó la canción De Quito el corazón, símbolo de su administración.
Su retraso, explicó en su discurso, se debió a una reunión en el COE, en donde analizó la situación del Cotopaxi. A los transportistas les dijo que “era una necesidad regularizar la situación”.
Eddy Sánchez, presidente de la Comisión de Movilidad, se refirió a Guamán y dijo que la enfermedad de los malos dirigentes es la “politiquería y hablar sin sustento”. Aclaró que hubo un estudio previo que determinó 2.415 unidades.
El concejal manifestó que si bien el análisis determinó que se necesitaban 1.100 unidades, eso no era vinculante. “Son la línea base, sobre eso lo que venga”, indicó.
Sánchez reiteró que los estudios para este servicio no son “una camisa de fuerza” y que “las normas se derivan de un análisis y de un proceso que se ha vivido”. (I)