La desaparición de personas deja huella en los familiares

Las personas desaparecen en el mundo por distintas causas. En unos casos se trata de secuestros a cambio de dinero; en otros, la gente desaparece porque sus captores las usan con fines de explotación sexual o trabajo forzoso. El uso intensivo que hacen en la actualidad los jóvenes de las redes sociales y sus actitudes despreocupadas frente a la información que entregan los hace vulnerables ante el acoso de personas que podrían intentar hacerles daño.

Muchas veces, los chicos interactúan con desconocidos sea a través del Internet o en la calle sin tomar en cuenta los peligros a los que podrían estar expuestos. Quienes más sufren por una desaparición son los familiares. ¿Dónde están? ¿Cómo están? ¿Seguirán vivos? ¿Estarán muertos? ¿Sufrirán? Son algunas de las preguntas que estos se hacen sobre sus seres queridos.

En muchos casos, intentan localizarlos colocando afiches en paredes y postes para obtener información. En la actualidad se usan también mensajes a través de las redes sociales. Por su parte, los expertos consideran que la manera de afrontar una situación así es mantener la calma; acudir a las autoridades; ir a los lugares que frecuentaba el desaparecido como su lugar de trabajo o estudio; pero, sobre todo, no enfrentarse con los posibles secuestradores en solitario. (I)