Frida Kahlo, el arte mexicano en una mujer

Frida Kahlo fue una pintora y poeta mexicana que cautivó a Latinoamérica con su obra. Nació en Coyoacán en el seno de una familia acomodada, desde muy joven Frida tuvo inclinación por el arte. En su juventud asistía a reuniones con intelectuales mexicanos, le gustaba leer y era partidaria de los movimientos de izquierda.

Su vida estuvo marcada por un grave accidente de tránsito, el cual le produjo lesiones en la columna y el vientre. Su recuperación tardó varios meses, es en este momento de su vida cuando la pintura se convierte en su libertad. La obra pictórica de Kahlo es incisiva. La mayoría de sus cuadros son autorretratos. Aproximadamente pintó unas 200 obras.

Se casó con el célebre muralista mexicano Diego Rivera, a pesar de ello su vida fue poco convencional, era bisexual y entre sus amantes se encontraba León Trotski, político y revolucionario ruso que fue uno de los organizadores de la Revolución de Octubre que permitió a los bolcheviques tomar el poder en Rusia en noviembre de 1917.

La obra de Kahlo está influenciada por Rivera, con quien compartió su gusto por el arte popular mexicano de raíces indígenas, inspirando a otros pintores mexicanos del período posrevolucionario. En 1939 expuso sus pinturas en Francia acudiendo a una invitación de André Breton, quien intentó convencerla de que sus obras eran surrealistas; sin embargo, ella no se adhirió al movimiento aduciendo que esta tendencia no correspondía con su arte ya que ella no pintaba sueños sino su propia vida.

Una de las obras de esta exposición, ‘Autorretrato-El marco’, que actualmente se encuentra en el Centro Pompidou, se convirtió en el primer cuadro de un artista mexicano adquirido por el Museo del Louvre. (F)