El cosplay es una forma de culto a las expresiones gráficas japonesas

El cosplay es la técnica de representación de las animaciones de origen asiático, sobre todo japonés. Este arte requiere de un gran esfuerzo para poner en escena no solo la apariencia del personaje, sino la actitud del mismo.

La tendencia nace en Japón cuando una de las denominadas tribus urbanas tomaron la iniciativa de disfrazarse de sus personajes favoritos provenientes del anime, manga e incluso de videojuegos.

Los cosplayers organizan eventos como reuniones y exposiciones sobre la temática, en la que se muestra una gran dedicación en la confección de los trajes, el perfeccionamiento de los maquillajes que los asemejen al personaje.

Pero lo más complicado es representar el mundo interior de esos mismos personajes, para evitar que terminen convertidos simplemente en personas disfrazadas. En el Ecuador, este tipo de eventos están ganando popularidad y también notoriedad.

Esto se debe, en gran parte, a la influencia que han adquirido en los últimos años la cultura derivada de las imágenes y animaciones niponas a través de series Death Note, Full Metall, Alchemist, Dragon Ball Z, Saint Seyia, etc.

El lado negativo de esta forma de expresión son las críticas que genera entre quienes se incomodan por no comprender de qué se trata o no ser tolerantes con quienes gustan de ella y la ponen en práctica sin molestar ni dañar a los demás.

No faltan personas que califican de ridículos e inmaduros a quienes se convierten en cosplayers. “El cosplay, más que un pasatiempo es un estilo de vida y una cultura que representa lo que representamos y nuestros gustos. Es dar vida mediante nosotros mismos a aquellos personajes que nos han marcado”, aseguró muy convencida Gabriela, practicante de esta técnica, de Misa Anan, personaje de la serie de anime Death Note. Actualmente se lee en Internet que la cadena Netflix está rodando la película de acción real basada en la historia. (I)