14 jóvenes recuperan la danza afroecuatoriana

En el barrio Carcelén, al norte de la ciudad, se encuentra el grupo de danza afroecuatoriana Yamboy. La agrupación está conformada por 14 bailarines de distintas edades, la mayoría de ellos viven en el sector.

El objetivo de este grupo es rescatar los bailes tradicionales de la cultura afro del Ecuador como son la bomba, el mapalé, la marimba y además la danza urbana.

El baile de la bomba proviene del valle del Chota, en Imbabura, tanto la música como el baile tienen mucha energía. Según, los integrantes del grupo de danza, con la bomba se eliminan todas las energías negativas.

La bomba incluye también poesía en sus letras, en ellas se cuentan historias de amor, esperanza, la historia de los pueblos y más. Las canciones son trasmitidas de generación en generación.

Los bailarines visten trajes típicos del valle imbabureño, las mujeres llevan faldas plisadas de colores, blusitas sobre el ombligo y una botella sobre su cabeza. Mientras que los hombres visten un pantalón arremangado sobre los tobillos, camisas blancas y sombrero.

De igual manera, el mapalé es uno de los géneros favoritos de los bailarines de Yamboy. En este baile sobresalen los sonidos de la percusión, los movimientos son más fuertes que los de la bomba.

El mapalé es un baile referente al cuerpo humano, es un género musical y bailable propio de la región Caribe colombiana. Esta tonada conserva características musicales típicamente africanas, con alegoría al pez mapalé cuando lo pescan.

Diana Benavidez, de 21 años, creó el grupo hace 3 años, señala que el fin de Yamboy es rescatar y dar a conocer la belleza de la cultura afroecuatoriana a los jóvenes.

Evelyn Banguera, quien es parte del grupo, mencionó que se lleva muy bien con sus compañeros “somos como hermanos, todos somos muy responsables con los repasos y damos lo mejor en las presentaciones”.

A pesar de que el conjunto tenga pocos años de creación, su dedicación y experiencia les ha llevado a varios escenarios en toda la ciudad. Uno de ellos fue el Colegio Patrimonio de la Humanidad.

Todos los domingos los bailarines del Yamboy se reúnen para practicar sus coreografías, los repasos duran entre 3 y 4 horas. (I)