”El país ha trabajado con dos instrumentos: el Decreto 915 (de 2016), que es la institucionalización de la Agenda de los Derechos de los Afrodescendientes, y el Decreto 60 (2009), que impulsa un plan plurinacional para la eliminación de la exclusión racial.  

Con estos se impulsó la política de inserción laboral, aunque se ha cumplido medianamente, ya que no hay indicadores muy claros.

Otro tema importante es el del censo, pero hubo resultados críticos porque se registraron inconsistencias en las cifras.

En el ámbito educativo hay brechas y así se ve en los censos. La desigualdad con los blancos y mestizos es pronunciada. En educación de bachillerato hay deserción por los problemas económicos de los padres de familia. Los jóvenes se dedican a trabajar. Por ello se necesita un programa de apoyo y de becas.

Los que concluyen los estudios superiores no llegan al 0,3%.

Algo que es importante resaltar es que desde fines del año pasado se restituyó la educación intercultural bilingüe. Esto tiene que concretarse mediante la ley y la institucionalización de la propuesta educativa”. (O)