Mandatario desestima pesquisas de CIDH sobre torturas cometidas por CIA
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, desestimó hoy las investigaciones que realiza la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre las torturas cometidas de 2001 a 2009 por la Agencia de Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA).
En el enlace sabatino, el jefe de Estado indicó que aunque la CIDH diga que está realizando las pesquisas, no pasará nada en torno a esos hechos expuestos en un informe del Senado norteamericano.
"Anoten y verán que no pasa nada porque Washington financia a la Comisión, porque la sede está allá en Washington y casi todos los comisionados van y vienen de fundaciones gringas", indicó el mandatario.
Esta semana, Ecuador emitió un comunicado en el cual expresó su preocupación por las prácticas de tortura y los tratos crueles, inhumanos y degradantes cometidos por la CIA, según el reporte del Senado.
En la nota difundida por la Cancillería, Quito manifestó la condena "a la tortura en todas sus formas, la que constituye una grave violación a los derechos humanos".
El gobierno ecuatoriano llamó a Washington a tomar las medidas necesarias para proteger el acceso a la justicia de las víctimas y sus familiares, procesar legalmente a los responsables, y adoptar los mecanismos necesarios para que no se repitan de estos hechos.
Asimismo, instó a la comunidad internacional a actuar para que violaciones como esas no se repitan, y exhortó a Washington a firmar y ratificar todos los tratados internacionales e interamericanos sobre Derechos Humanos.
En la rendición de cuentas de hoy, Correa recordó la contradicción de la CIDH y la Organización de Estados Americanos tengan sede en Washington y reciban financiamiento de esa nación, la cual no ha ratificado los instrumentos interamericanos de Derechos Humanos.
El mandatario estimó que se trata de una nueva forma de neocolonialismo en el siglo XXI.