Entrevista / Consuelo Aguirre/ Investigadora Universidad de los Hemisferios

“El uso de fuentes informativas en Ecuador es pobre”

Un informe de la Universidad de Los Hemisferios reveló que los medios concentran sus notas en la agenda de Rafael Correa. El Tiempo y El Comercio son los que más cubren al Presidente. EL TELÉGRAFO está en tercer puesto. Consuelo Aguirre participó en esa iniciativa y explica las conclusiones.

¿Han evolucionado los medios en Ecuador?

Todo el tiempo están cambiando y sobre todo con la introducción al internet como un nuevo soporte. Los géneros periodísticos están evolucionando. Un reportaje impreso no es lo mismo que uno multimedia, que ha ido cambiando. El reportaje multimedia de hace 5 años no es el mismo de ahora. Antes integraba todos los formatos, además de video y audio en una sola página web, ahora  tenemos un especial multimedia en un video y una galería, todo el tiempo está cambiando y es necesario medir esta evolución.

¿La necesidad de ser cibermedios es una exigencia periodística o del mercado?

Las 2, porque si no estás en internet, no estás utilizando todos los canales de comunicación que un medio necesita para llegar a las audiencias, y desde cierta edad las audiencias solo están accediendo a las noticias y a los contenidos por internet. Por otro lado, si no estás en las plataformas digitales, no estás innovando, porque la innovación es territorio del internet más que de los formatos tradicionales como radio, prensa y televisión.

¿Cuáles valores del periodismo tradicional se expresan en estos cibermedios?

Hay valores que nunca van a cambiar, como la investigación, documentación, uso de fuentes, la contrastación de fuentes. Por más que estemos en la plataforma digital más avanzada del mundo como The New York Times, que tiene un concepto de periodismo digital muy de vanguardia, necesitamos mantener los valores periodísticos que son la contrastación de fuentes, diversidad en el uso de géneros, porque el lector no quiere solo leer noticias, sino que necesita leer crónicas, reportajes multimedia, esa diversificación y documentación debe estar presente.

¿De qué manera esto se evidencia en el estudio que publicaron?

El uso de fuentes en Ecuador es pobre y eso no tiene que ver con que el medio sea digital o no. El 86% de los contenidos que investigamos en nuestro estudio tiene 1 o 2 fuentes, y la contrastación es importante.

¿Por qué escogieron 4 medios impresos y no otros como Ecuadorenvivo, Ecuadorinmediato o Confirmado.net?

Es una primera fase. Escogimos a los periódicos que más lectoría y prestigio para medir la transición. El Comercio y El Universo como los privados más leídos y EL TELÉGRAFO como un medio público importante, además de El Tiempo como un medio regional.  

En el informe llama la atención que EL TELÉGRAFO, lejos del imaginario ciudadano, es el que menos noticias presidenciales tiene en comparación con El Universo y El Tiempo. ¿Cómo interpretan aquello?

Nos llamó la atención porque yo decía que el Presidente debe tener una fuerte presencia en EL TELÉGRAFO, mucho más que en otros medios y no es así. La información política copa la agenda de todos los medios, independiente de que sean públicos o privados. EL TELÉGRAFO no necesariamente tiene su  agenda enfocada solo en Rafael Correa. (I)

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Entrevista / Iván Rodrigo/ Investigador de la Comunicación

“Los medios han dejado la información por la opinión”

Iván Rodrigo comenta sobre el estudio “La credibilidad de medios y periodistas en Ecuador en 2013 y su relación con lo político”. Según el investigador, la confianza hacia EL TELÉGRAFO y Ecuador TV ha aumentado en los últimos años. Asegura que en el país es posible hablar de una evolución del periodismo.

¿Hay una evolución o involución del periodismo?
Se podría hablar de una evolución.

¿En qué sentido, si, según su criterio, el periodismo pierde el poder investigativo?

Si bien hay una caída, luego hay una subida leve, lo que indica que hay un remezón; los periodistas se han dado cuenta de que no se puede hablar en base al sentido común, que no se puede hablar con pocas fuentes y menos con fuentes que no tengan autoridad. En algunos momentos el periodista peca por el hecho de que va a la fuente y se olvida de contrastar. En el último año considero que la gente de los medios se dio cuenta de que es necesario cambiar el tipo de periodismo.

¿Cambiarlo hacia dónde?

A un periodismo que tenga mayor solidez. A los periódicos y a los medios todavía les falta trabajar en la calidad de los contenidos. Una cosa son los contenidos informativos, que sean veraces, objetivos, pero les falta también la calidad informativa. Por ejemplo, en el informe hay algo interesante: EL TELÉGRAFO, de niveles de credibilidad bajísimos, sube a un cierto nivel.

¿Cómo se interpreta este incremento, al igual que el alza en índices de credibilidad de los medios públicos?

Un periodismo crítico es lo que falta, además de responsable. Se necesita que sea crítico, que tenga los datos contrastados, no puedes hacer escándalo de las cosas, tienes que ser cabeza fría en ese contexto;esa es una de las cosas que muestran los medios públicos.
Al inicio muchos desconfiaban y decían que son medios del gobierno, pero ahora se dan cuenta de que frente a los medios de comunicación que te ofrecen casi la misma información espectacular, incluso vaciada de contenido, hay un nicho de información interesante por el carácter investigativo que tienen los públicos, porque hay temas nuevos.
En los medios públicos, temas de las minorías, los indígenas y la mujer se abordan con seriedad, al contrario que en los medios privados, en donde no aparecen o lo hacen dentro del espectáculo rosa.

¿Qué sucede en el campo de la opinión?

Los medios de comunicación, como por ejemplo la radio y la televisión, han dejado la información por la opinión. Los opinadores empezaron a aparecer como hongos y muchos de ellos hablando sin ningún criterio que lo sustente, más que cierto conocimiento político y social.

¿La gente les cree a ellos?

No, porque solo aparecen por coyunturas. En cambio tenemos gente que sustenta sus opiniones, como vemos en las páginas de EL TELÉGRAFO, incluso en lo cultural, con Cartón Piedra, porque se requiere ese tipo de periodismo que ayude a pensar a la gente, no que el periodista piense por la gente, no que el periodista te dé la solución del conflicto, sino darle los criterios para que la gente pueda elaborarse sus propios criterios y tomar las decisiones correctas.
A los medios les hace falta espacios de crítica. Se ha abandonado los espacios de crónica, ensayo, entrevistas a profundidad, solo se hacen las que se ligan a coyunturas, pero sin interiorización de temas. (I)