La victoria de los conservadores populistas en las legislativas de Polonia suma a este país miembro de la OTAN al campo de países euroescépticos en el seno de la Unión Europea (UE), reforzado por la crisis migratoria.

"Polonia refuerza el campo de los países euroescépticos, entre los que se incluye Gran Bretaña, que tratan de reformar la UE, aflojando sus lazos internos", dice a la AFP Marcin Zaborowski, del estadounidense Centro de Análisis de la Política Europea (CEPA).

El experto recuerda que el Partido Derecho y Justicia (PiS, oposición) de Jaroslaw Kaczynski, vencedor de las elecciones, nunca tuvo una prédica antieuropea y que incluso apoyó la adhesión del país al bloque en 2004.

Pero el PiS, miembro de la bancada de Conservadores y Reformistas en el Parlamento Europeo, nunca escondió su apoyo a una "Europa de las Naciones" y sus críticas al poder de Bruselas.

El PiS obtuvo 232 de los 460 escaños en el Parlamento polaco, según las últimas proyecciones, y con esa mayoría absoluta podrá implementar su política.

"Pondrá énfasis en los intereses nacionales, en detrimento de los intereses europeos. Quiere una unión económica, más que una unión política", afirma el politólogo Kazimierz Kik.

Desde ese punto de vista, se suma al grupo de fuerzas que tratan de reducir el poder de Bruselas, que sean de derecha -como el Frente Nacional en Francia-, o de izquierda", agrega.

El PiS -que derrotó a los liberales eurocentristas de Alianza Cívica- tiene la intención declarada de tejer alianzas regionales con otros países del exbloque comunista que forman el Grupo de Visegrado (Polonia, Hungría, Eslovaquia y República Checa), con los que comparte la resistencia a la acogida masiva de refugiados procedentes de Medio Oriente y África.

"El partido de Kaczynski buscará alianzas para reformar los tratados europeos y reforzar las posibilidades" de no participar en algunas políticas comunitarias, añade Zaborowski. "En este caso, Reino Unido será su socio preferente, aunque su lista de excepciones no es la misma que la de Londres".

Un primer acercamiento tuvo lugar durante una reunión entre el presidente polaco Andrzej Duda, del PiS, y el primer ministro británico, el conservador David Cameron, el 15 de septiembre en Londres.

"El encuentro se desarrolló en un muy buen ambiente, el ámbito de cooperación entre nosotros es muy amplio", declaró Duda tras la reunión en la que abordaron temas de migración, defensa y energía.

Negociaciones sobre el clima

"Aunque David Cameron aún no telefoneó a Jaroslaw Kaczynski para felicitarlo por su victoria, debería hacerlo rápidamente", asegura Zaborowski. "Cameron quiere dejar Reino Unido en el seno de la UE y Polonia puede ayudarlo a conseguir concesiones para convencer a los británicos de votar "no" a su salida de la Unión en el referéndum de 2017.

Polonia espera, sobre todo, conseguir el apoyo de Londres durante las negociaciones sobre el clima. El PiS considera que el carbón debe seguir siendo la principal fuente de energía del país. El partido hizo grandes promesas a los minores y negociará duramente con la UE su posición sobre la lucha contra el cambio climático.

La formación de Kaczynski, que respaldará a Cameron sobre sus posturas antimigratorias, defenderá también los intereses del cerca de un millón de polacos que viven en Reino Unido, y de los casi 700.000 que emigraron a Alemania.

El PiS, que gobernó en los años 2005-2007, se distinguió por sus opiniones abiertamente germanófobas y rusófobas y por sus tensiones con Bruselas sobre varias cuestiones.

Pero "ha aprendido la lección y no hará declaraciones sin ton ni son, sino que abogará por un acción eficaz entre bastidores para no encontrarse aislado como le ocurrió en aquella época", considera Eryk Mistewicz, especialista en marketing político.

El partido "utilizará la Unión Europea según sus intereses, va a instrumentalizarla", opina Kik. (I)