Es la novedad electoral en Chile. Y por su perfil -periodista, exconductor de noticiarios y actual senador independiente por Antofagasta (en el norte), aunque cercano al oficialismo de Michelle Bachelet- acapara parte importante del interés de los electores chilenos, con miras a los comicios presidenciales de fin de año. Se trata de Alejandro Guillier, de 63 años, y que fue proclamado por el Partido Radical, que forma parte de la Nueva Mayoría de la presidenta socialista.

La figura de Guillier como posible candidato presidencial irrumpió en la segunda mitad de 2016 y su alta figuración mediática lo ha instalado como uno de los favoritos para suceder a Bachelet. Incluso ha logrado mantenerse en las encuestas y por ahora es el único que tiene chances de ganarle al expresidente Sebastián Piñera (centroderecha), quien aparece arriba en todos los sondeos.

De acuerdo con la última encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP), la de mayor credibilidad del país, Piñera tiene el 20% de respaldo, seguido por Guillier, con el 14%. Más atrás aparece el expresidente Ricardo Lagos, estancado con el 5% desde el año pasado. Los partidos políticos que integran la Nueva Mayoría se encuentran enfrascados en una seria disputa, ya que algunos levantan la candidatura de Guillier, pero otros prefieren a Lagos más allá de lo que digan los sondeos.

Pero por ahora, Guillier es quien se alza como la carta del oficialismo, como candidato del Partido Radical, uno de los conglomerados políticos más antiguos del país y que ya tuvo a cuatro presidentes de la República en el siglo XX; el último, Gabriel González Videla (1946-1952).

Al ser proclamado en la cúpula del Parque O’Higgins -recinto con capacidad para unas 2.000 personas-, Guillier señaló que los sendos casos de corrupción, tanto a nivel de gobierno y la oposición, como del mundo empresarial, “desataron un profundo clima de malestar y da como resultado un tremendo distanciamiento que hay entre la gente y los políticos”. (I)