Un barón de la droga indonesio dirigía una red de tráfico desde su celda

Un barón de la droga indonesio, condenado a muerte, controlaba desde su celda una red de tráfico de metanfetaminas y éxtasis, que fue desmantelada este jueves, anunció la policía.

Una docena de personas fueron detenidas, en tanto la policía afirmó haber incautado 111 kg de metanfetaminas y más de 18.000 píldoras de éxtasis en las provincias de Aceh y Sumatra del Norte.

Condenado a la pena de muerte en dos ocasiones por tráfico de drogas, Togiman, también conocido como 'Toge', dirigió desde la prisión su red con ramificaciones que se extendían hasta Malasia, informó la policía.

"El cerebro era Togiman", afirmó Sulistiandriatmoko, portavoz de la agencia antidrogas de Indonesia.
El prisionero, sexagenario, será acusado de tráfico de drogas, prosiguieron las autoridades, y los tribunales tendrán que decidir si será condenado a muerte por tercera vez.

Aún se ignora cómo era capaz de coordinar una red criminal estando tras las rejas, pero las cárceles indonesias se caracterizan por la corrupción y una criminalidad en ascenso.

Tal es así, que el 50% del tráfico de drogas en el país se hace desde las prisiones.

En cuanto a la corrupción, el caso de una mujer lo ilustra claramente. A pesar de estar prohibidos, la presa disponía en su celda de un colchón de resortes, refrigerador, un televisor y aire acondicionado.

En Indonesia, donde la legislación contra el tráfico de drogas es una de las más severas del mundo, en los últimos años han sido ejecutados varios ciudadanos extranjeros e indonesios, por lo general fusilados. (I)