Un accidente de tren deja dos muertos en Bélgica
Bélgica.- Dos personas murieron y catorce fueron hospitalizadas ayer cerca de Gante, en Bélgica, tras el descarrilamiento y explosión de varios vagones cisterna de un tren que transportaba un producto químico líquido inflamable y muy tóxico ya que emana un gas cercano al cianuro.
El balance lo proporcionó el gobernador de Flandes Oriental, Jan Briers, citado por la agencia belga. Las víctimas son habitantes que residen en una zona alejada del lugar del accidente y la ministra del Interior, Joelle Milquet, apuntó a la emanación de gases tóxicos como posible causa.
El accidente se produjo como a las 02:00 locales (00:00 GMT) entre las localidades de Schellebelle y Wetteren. Seis de los trece vagones del tren descarrilaron y dos se volcaron.
El incidente provocó una explosión y una llamarada se propagó a varios centenares de metros. El fuego se inició en tres cisternas que transportaban acrilonitril, un producto químico líquido inflamable utilizado en los plásticos.
El gas que emana es próximo al cianuro, indicaron los expertos. Esto motivó la decisión de evacuar a unas 300 personas en un radio de 500 metros alrededor del accidente. Las emanaciones tóxicas afectaron más allá, a través de las aguas residuales, explicó Milquet.
Al final de la mañana el incendio estaba bajo control, pero las autoridades pidieron a los vecinos que mantuvieran cerradas las ventanas.
Aunque se desconocen las causas del accidente, las autoridades no descartan la hipótesis de que el tren circulara a una velocidad excesiva. Los vagones descarrilaron durante un cambio de agujas al pasar por una zona de obras.
El tren provenía de Holanda y se dirigía a Gent-Zeehaven, el puerto marítimo de Gante. El tráfico ferroviario quedó interrumpido entre Schellebelle y Wetteren y se esperan perturbaciones en los dos próximos días.
En mayo de 2012 se registraron en Bélgica dos accidentes similares con trenes de mercancías que transportaban cisternas con productos tóxicos.