Un ataque con aviones teledirigidos estadounidenses destruyó la emisora del movimiento terrorista Estado Islámico (EI) en Afganistán, La Voz del Califato.

Ataullah Khogyanaim, vocero del gobierno provincial de Nangarhar, informó que el redada aérea también dejó un saldo de 29 muertos, incluidos cuatro empleados y tres técnicos de la planta.

Ataullah explicó que la operación comenzó anoche con cuatro drones en el distrito Achin.

La emisora del grupo extremista transmitió durante meses mensajes con llamamientos a la población, sobre todo a los jóvenes, para que se enrolaran y levantaran contra el gobierno afgano.

De acuerdo con Zabihullah Zmarai, del Consejo provincial, la destruida estación inició transmisiones en idioma pastún y luego incluyó el dari y el inglés.

El EI la utilizaba como herramienta de presión psicológica contra la población, indicó.

La organización terrorista opera en al menos cuatro provincias del este y el sur de Afganistán, pero en la occidental Nangarhar es donde erigieron su mayor bastión, en tanto que controlan amplias zonas. (I)