Al menos 4 personas murieron y 40 resultaron heridas, tras un atentado terrorista fuera del Parlamento británico, en pleno centro de Londres, en el que dos atacantes que manejaban una camioneta arrollaron a múltiples transeúntes, antes de que uno de ellos apuñalara a un policía en los jardines del histórico Palacio de Westminster.

A última hora de la noche, la policía incrementó el balance de víctimas, aunque siguió sin desvelar la identidad del autor del ataque. Se sospecha de terrorismo islamista.

Entre las víctimas mortales constan un policía que fue acuchillado frente al Parlamento y el atacante, dijo más temprano a periodistas Mark Rowley, principal de la unidad antiterrorista de Scotland Yard.

El incidente ocurrió hacia las 14.40 (hora local) en las inmediaciones de las Casas del Parlamento, en el barrio gubernamental de Westminster, uno de los más vigilados de Londres.

El presidente de la Cámara de los Comunes, David Lidington, confirmó de inmediato que uno de los atacantes fue reducido a tiros por agentes armados a metros del ingreso al Parlamento.
En tanto, el policía apuñalado, quien fue resucitado por el parlamentario Tobías Elwood, falleció más tarde en el hospital cercano de St.Thomas.

Lidington informó que la sesión parlamentaria que se estaba celebrando dentro del recinto fue suspendida y el edificio quedó cerrado y acordonado por varias horas, antes de ser evacuado.

“Todo indica que un agente policial fue apuñalado, y que el atacante fue reducido a tiros por policías armados”, explicó el legislador.

Decenas de vehículos policiales, ambulancias y dotaciones de bomberos fueron desplegadas a la zona, que quedó totalmente acordonada.

Además, la estación de metro de Westminster fue cerrada como medida de seguridad, y se reforzó la seguridad en el Palacio de Buckingham, residencia oficial en Londres de la reina Isabel II.

También se suspendió el servicio de la Noria de Londres, con decenas de turistas que debieron esperar a ser evacuados.

El ataque comenzó cuando dos atacantes en una camioneta 4x4 Hyundai arrollaron a múltiples personas en el puente de Westminster, sobre el río Támesis, que suele ser utilizado por miles de turistas y trabajadores.

Según el relato de testigos presenciales, el vehículo habría circulado a toda velocidad por la calzada derribando a una decena de personas, entre ellas tres alumnos franceses, para colisionar minutos después frente a las vayas del Parlamento, justo debajo de la Torre del Big Ben.

Uno de los atacantes abrió luego fuego con una pistola, en tanto que un segundo ingresó a los jardines del edificio, donde apuñaló al policía antes de ser reducido a balazos.

Una mujer falleció tras ser arrollada en el puente de Westminster y varios personas estaban con heridas “muy graves”, de acuerdo a un portavoz del Hospital St. Thomas, donde fueron trasladados los afectados.

Otra mujer, que saltó el puente y cayó al Támesis, fue rescatada con vida por los servicios de emergencia, aunque su estado de salud era muy delicado.

Además, se allanaron las instalaciones del Parlamento ante sospechas de un paquete sospechoso dentro de un vehículo, que terminó siendo una falsa alarma.

El comandante Ben Harrington, de la Policía Metropolitana, confirmó que hubo al menos dos muertos en el ataque, incluidos un policía.

Instó a los londinenses a mantenerse “vigilantes” y confirmó que Scotland Yard desplegará a más agentes armados a las calles de Londres.

“Vamos a revisar las medidas anti-terroristas”, agregó.

En tanto, Matt Haikin, un trabajador de 44 años que se encontraba en el lugar, dijo que el hecho fue “una pesadilla”.

“Vi como un vehículo a toda velocidad arrollaba a varios peatones, para luego chocar contra las verjas del Parlamento”, afirmó el testigo.

“Mientras trataba de acercarme, vi cuerpos de varias personas cubiertas de sangre. Luego escuché algunos disparos. En ese momento me di cuenta que no se trata de un simple accidente automovilístico, sino de un atentado terrorista”, agregó.

La Policía pidió a los trabajadores de la zona que permanezcan en sus oficinas y llamó a la calma tras el primer atentado terrorista de grandes dimensiones en Londres desde los ataques del 7 de julio de 2005, cuando 56 personas murieron- entre ellas los cuatro atacantes suicidas- y más de 700 resultaron heridas.

En mayo de 2013, dos islamistas británicos habían apuñalado al soldado inglés Lee Rigby en las calles del sur de Londres.

A car on Westminster Bridge has just mowed down at least 5 people. pic.twitter.com/tdCR9I0NgJ

— Radosław Sikorski (@sikorskiradek) March 22, 2017

Por su parte, la primera ministra Theresa May, que estaba en la sesión parlamentaria, se encuentra a salvo y fue trasladada en un vehículo Jaguar blindado a su residencia oficial de Downing Street, según su portavoz.

May encabezó más tarde una reunión de emergencia Cobra, que incluyó a ministros, autoridades de la Policía, y de los servicios de Inteligencia y de Defensa, en la que se

Incident in #Westminster: We are treating this as a terrorist incident until we know otherwise

— Metropolitan Police (@metpoliceuk) March 22, 2017

En Escocia, el Parlamento decidió suspender la sesión que debatía un segundo referendum por la independencia del país, en solidaridad con el ataque ocurrido en la capital británica. Lo mismo ocurrió en la Asamblea de Gales, en Cardiff, donde se suspendieron las sesiones parlamentarias.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue informado de inmediato sobre el atentado terrorista en Londres.

Gran Bretaña mantiene su nivel de alerta terrorista a “severa”, que implica que un atentado es “altamente probable”. 

Este hecho ocurre exactamente al recordarse el primer aniversario de los atentados de Bruselas que dejaron 32 muertos en el aeropuerto y el metro de aquella ciudad. (I)