Montevideo.-

México se puso hoy a disposición de los países latinoamericanos para recibir sus propuestas de cara a la cumbre del G20 que albergará en junio próximo, en medio del interés de los países pequeños por la iniciativa, y una tibia respuesta por parte de los otros dos miembros del grupo, Brasil y Argentina.

México expresó esta disposición en una reunión en Montevideo, organizada por José Antonio Meade, ministro de Hacienda de México, en el marco de la Asamblea Anual del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que se centró en los efectos de la regulación financiera sobre los flujos de inversión en la región y la necesidad de potenciar un comercio abierto.

"Se habló de que cuidáramos que los consensos que lográramos en materia de regulación no se traduzcan en que haya menor flujo de crédito hacia Latinoamérica", indicó a Efe Meade al término del encuentro, de carácter reservado y en el que las delegaciones de Argentina y Brasil se abstuvieron de intervenir.

Meade señaló que en la cita de hoy, convocada por México, que ostenta la presidencia actual del G20 y que organizará la cumbre presidencial de ese bloque el próximo mes de junio, también se discutió sobre una "cierta preocupación" respecto a posibles efectos de contagio procedentes de la crisis financiera europea en América Latina, pero que el balance sigue "implicando optimismo" para la región.

Por su parte, el ministro de Economía de Paraguay, Dionisio Borda, valoró la disposición mostrada por México de recibir sus propuestas de cara a la cumbre del G20 y señaló que se trata de una "iniciativa auspiciosa" para aquellos países que no forman parte de ese grupo, que integra a las economías desarrolladas y emergentes.

Entre sus preocupaciones, Borda resaltó la llamada "guerra cambiaria" que hace "perder competitividad a los países menos desarrollados", ya que estas naciones acaban tomando medidas para "proteger sus mercados locales".

Meade también se refirió al proteccionismo, uno de los temas recurrentes de estos días en Montevideo, por las recientes medidas aplicadas por los principales mercados de la región: Brasil y Argentina, que han sido criticadas por sus principales socios comerciales en el seno del Mercosur (Paraguay y Uruguay).

"Si hemos de salir de este entorno complicado tiene que ser por la vía de la coordinación y no caigamos en esas tentaciones proteccionistas", precisó el secretario mexicano a una consulta expresa de la prensa.

Brasil y Argentina son, junto con México, los tres países latinoamericanos que forman parte del G20, el foro internacional en el que se reúnen para discutir y analizar la evolución económica los líderes de las 20 principales economías mundiales.

Igualmente, la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribel (CEPAL), Alicia Bárcena, destacó el diálogo abierto por México.

"Lo más interesante es que el G20 no debe nada más focalizarse hacia las preocupaciones de sus miembros, sino también a los problemas que están sufriendo economías pequeñas, de mediano ingreso, como el Caribe, altamente endeudadas", explicó tras participar en el encuentro.

Bárcena defendió que "cada país tiene una forma distinta de abordar los temas porque tienen una estrategia de crecimiento, de desarrollo diferentes, no hay modelos únicos, eso es lo que esta crisis ha mostrado".

Los ministros de economía latinoamericanos se encuentran en Uruguay para asistir el domingo y el lunes a las reuniones de gobernadores y sesiones plenarias del BID, uno de cuyos temas principales es ahondar en la integración regional.

También hoy se realizó en Montevideo una reunión breve y con un limitado poder de convocatoria del Consejo de ministros de Economía de la Unión Suramericana de Naciones (Unasur), en la que revisaron los principales temas de la agenda del bloque en la materia.