México.-

Cientos de estudiantes y sindicalistas mantenían cercada ayer la sede de la cadena mexicana Televisa para protestar contra una supuesta campaña de información favorable al candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y ganador de las elecciones de julio, Enrique Peña Nieto.

Los manifestantes pasaron desde la noche del jueves en las carpas que armaron, mientras  que policías protegían la televisora, la principal de México y la mayor de habla hispana, que mantuvo las emisiones de sus cuatro señales de televisión abierta.

Algunos encendieron fogatas para protegerse del frío, mientras improvisadas bandas musicales interpretaban rock y canciones folclóricas con letras adaptadas a sus denuncias. “No más telenovelas, queremos más escuelas”, coreaban.

La manifestación, que se nutría paulatinamente al salir el sol, fue convocada por el movimiento estudiantil #Yosoy132, con apoyo de sindicatos y organizaciones populares, para protestar contra las presuntas irregularidades de parte del PRI, entre las que señalan compra de votos con recursos públicos e incluso ilícitos, y una campaña mediática para favorecer a Peña Nieto.

Unas 7.000 personas, según estimaciones de la Policía, participaron en la protesta la noche del jueves, provocando   caos vial, pero solo algunos cientos pernoctaron. “Televisa y TV Azteca son la cara más visible y el principal instrumento de la oligarquía que gobierna este país, de los poderes fácticos que, de acuerdo a sus intereses, imponen y quitan gobernantes”, señalaron los estudiantes en una proclama leída al iniciar el plantón.

“Sabemos que los estudiantes no podemos solos y por ello, convocamos a todos los movimientos sociales, organizaciones civiles y políticas, así como al pueblo en general a sumarse”, agregó el manifiesto leído por cuatro universitarios.

“Nuestra protesta se va a mantener, vamos a seguir manifestándonos en las calles porque ese es nuestro derecho democrático”, dijo Antonio Attolini, uno de los portavoces del movimiento #Yosoy132.

Los partidos de la coalición de izquierda que impugnaron y reclamaron al Tribunal Electoral declare inválidos los comicios se desligaron de la convocatoria, aunque pidieron respetar el derecho a la protesta.

El candidato de izquierda, Andrés Manuel López Obrador, que según el cómputo oficial, obtuvo 31,6% con unos 3,3 millones de votos menos que Peña Nieto (38,2%), propuso el jueves que México se prepare para tener “un presidente interino”.

López Obrador apuesta a que la elección será invalidada y se tendrá que llamar a nuevos comicios, pero expertos en derecho electoral estiman que no hay elementos para que ocurra.

El Tribunal Electoral tiene plazo hasta el 6 de septiembre para proclamar el nombre del presidente electo para el período 2012-2018. “Aquí se ve, aquí se ve que Peña Nieto presidente no va a ser”, fue una de las consignas más repetidas en el transcurso de la noche.

El PRI, que ha tildado de mentiroso y mal perdedor a López Obrador, ha pedido que se acate “el voto depositado por cerca de 50 millones de mexicanos” en referencia al total que hubo en los comicios. Peña Nieto, ex gobernador del estado de México, dijo que respeta todas las manifestaciones, pero pidió que “se mantengan dentro de la legalidad y las vías pacíficas”.