Bolivia vivió ayer una fiesta democrática con tranquilidad, aseguró el ministro de Gobierno (Interior), Hugo Moldiz, al hacer un balance de las primeras horas de la jornada electoral que coincidió con el Domingo de Ramos.

En la cita 6’043.162 bolivarianos eligieron un total de 4.975 autoridades; 9 gobernadores, 8 subgobernadores, un vicegobernador, 11 ejecutivos seccionales, 19 corregidores, 228 asambleístas territoriales, 18 asambleístas regionales, 24 asambleístas indígenas, 4 asambleístas campesinos, 206 asambleístas poblacionales, 339 alcaldes y 4.026 concejales. La Unasur y la OEA participaron como veedores de la jornada.

“Los bolivianos están dando una prueba de gran civismo en estas elecciones regionales”, indicó Wilfredo Penco de la Unasur.

Moldiz aseguró que 15 mil efectivos policiales y otros tantos de las Fuerzas Armadas velaron por la tranquilidad de la votación, y recalcó, sobre todo, la seguridad en el departamento opositor de Beni “donde se decía que en 4 o 5 municipios no se iba a permitir la instalación de mesas”.

De acuerdo a encuestas, los postulantes a las gobernaciones por el partido del presidente Evo Morales, el Movimiento al Socialismo (MAS), lideran la intención de voto en 5 de los 9 departamentos, mientras que candidatos opositores aparecen como favoritos en las otras 4 regiones. El resultado no afectará la estabilidad de Morales, reelegido con el 61% de los votos el año pasado para un tercer mandato de 5 años.

Los primeros resultados oficiales de las elecciones regionales se conocerán en un plazo de 15 días.