El Ejército libanés contraataca en la frontera con Siria
Los soldados libaneses proseguían ayer su ataque contra las posiciones del grupo Estado Islámico (EI) en la frontera este del país con Siria, tras haber arrebatado a los yihadistas un tercio del territorio que controlaban en la zona.
El Ejército libanés lanzó el sábado una ofensiva para expulsar al EI de las regiones montañosas del este de Líbano, en una nueva operación contra la organización yihadista, que ya está sometida a intensas ofensivas en Siria e Irak.
En las regiones Yurud Ras Baalbeck y Yurud al Qaa el Ejército libanés reconquistó unos 30 km2 que estaban en manos de los yihadistas, anunció el sábado en la noche el general Nazih Jreij.
Según él, 20 combatientes del EI murieron y 10 soldados libaneses resultaron heridos.
El sábado, los soldados libaneses izaron una bandera española en una colina retomada al EI, en homenaje a las víctimas de los atentados en Barcelona y Cambrils (Cataluña, noreste de España) reivindicados precisamente por este grupo yihadista y que causaron esta semana 14 muertos.
Según el Ejército libanés, antes de la operación iniciada el sábado, había cerca de 600 combatientes yihadistas en las regiones fronterizas, donde controlaban un área de unos 120 km2.
Coincidiendo con el anuncio de la ofensiva del Ejército, el movimiento chiita armado libanés Hezbolá -aliado del régimen sirio de Bashar al Asad- notificó el inicio de una ofensiva para desalojar al EI del lado sirio de la frontera.
Sin embargo, un portavoz del Ejército libanés desmintió cualquier “coordinación” entre las Fuerzas Armadas, el Hezbolá y las tropas sirias.
El Hezbolá es el único partido libanés que no entregó las armas al final de la guerra civil libanesa (1975-1990). Su poderoso arsenal es fuente de divisiones en el país, donde sus detractores acusan al partido de ser un Estado dentro del Estado.
La última gran batalla del Ejército libanés se remonta a 2007, cuando se enfrentó durante tres meses a grupos yihadistas en el campo de refugiados palestinos Nahr al Bared (norte). Aquella ofensiva dejó más de 400 muertos, entre ellos 168 soldados y 220 islamitas.
Líbano, un país de cuatro millones de habitantes, acoge a un millón de refugiados sirios.
La guerra siria dejó más de 330.000 muertos y millones de desplazados desde su comienzo en 2011. (I)