Periodistas denuncian abusos en los medios
Uno de los acontecimientos que llenaron las portadas de los principales medios de comunicación a inicios del año fue el incremento del salario mínimo para quienes trabajan en relación de dependencia. En el caso de los periodistas de 400 dólares aumentó a 817 dólares.
El Gobierno por la falta de acuerdo entre los trabajadores y empleadores impuso el nuevo mínimo salarial.
Según la nueva tabla salarial, quienes ganaban 400 dólares y estaban en la categoría más baja perciben 550 dólares. La siguiente categoría es 675 dólares, continúa 817 dólares y la más alta 900 dólares. Los salarios en este sector no se habían incrementado durante años.
Luego de la decisión tomada el pasado enero por el Ejecutivo hubo varias reacciones a favor y en contra de la medida. Dueños de los medios anunciaron que habría despidos y los comunicadores comenzaron a denunciarlos.
Los comunicadores radiales aseguraron, en pasado enero, que pocos tienen relación de dependencia y que compran espacios de opinión de los cuales se lucra el dueño de la radio por la sintonía que tiene.
“Años se enriquecieron a costillas de los periodistas. Éramos los peores pagados en una radio. Ahora al percibir 817 dólares realmente se ha hecho justicia a nuestra sacrificada labor”, señaló un periodista de radio Caravana, quien pidió que no se revelara su identidad por represalias en el medio de comunicación.
Según comunicadores de los diarios La Hora y Hoy, los titulares de estos rotativos les anunciaron que reducirían el personal, a pesar de que la satisfacción fue colectiva por el aumento salarial.
Un comunicador que trabajó en el periódico Meridiano señaló que en varios casos los propietarios pagaban el sueldo con sacos de arroz, hojas de papel bond, botellas de licor y descuentos para comprar electrodomésticos.
El entonces presidente del Colegio de Periodistas del Guayas, Édgar Cedeño, dijo que esta es una justa aspiración del gremio. Demandó de los periodistas afiliados y no afiliados que inmediatamente presentaran la denuncia si no había el incremento. “La decisión de nosotros es una lucha constante por los intereses de los comunicadores”, aseguró.
De su parte, la presidenta del Colegio de Periodistas de Pichincha, Susana Piedra, en enero pasado manifestó que “el incremento salarial era un arma de doble filo, fue un error del Ministerio y del Ejecutivo indicar que los estudiantes de periodismo podrían ser contratados y obtener un suedo”.
En la actualidad muchos comunicadores están agradecidos por el aumento salarial, sin embargo señalaron que falta mucho por hacer y reconocer esta sacrificada labor.