Carlos Borja, presidente del Tribunal Sexto de Garantías Penales de Pichincha, ha convocado para el próximo 17 de octubre, a las 08:30, a una nueva audiencia de juzgamiento en contra del policía Hernán Salazar, acusado de disparar una bomba lacrimógena a la cabeza del estudiante Édison Cosíos.

La decisión fue tomada por Borja debido a la falta de testigos, por lo que dispuso la detención de las personas que no concurrieron a la diligencia que debía realizarse ayer, pese a haber sido debidamente notificados.

"El aplazamiento de la diligencia fue planteada por la Fiscalía, con el respaldo de la acusación particular. Los solicitantes sostienen que los testimonios de todos los testigos y peritos son de importancia trascendental para comprobar la responsabilidad del acusado", dijo el Ministerio del Interior.

A la audiencia asistieron el ministro del Interior, José Serrano; el comandante general de Policía, general Rodrigo Suárez; el comandante de Policía del Distrito Metropolitano de Quito, general Juan Carlos Rueda; y del comandante general de Policía, saliente, general (SP) Patricio Franco.

"La presencia de las autoridades se enmarca en la política institucional del Ministerio del Interior y la Policía Nacional, de transparentar la actuación de cada uno de sus integrantes, así como el facilitar que sea la justicia la única llamada a resolver sobre la responsabilidad penal o civil de los acusados de hechos reñidos con la legalidad", señaló la institución.

Cosíos, alumno del Colegio Mejía, fue herido el 14 de septiembre del 2011 durante manifestaciones estudiantiles convocadas para rechazar la aprobación del bachillerato unificado y la nueva Ley de Educación Superior.

El policía Hernán Salazar fue acusado de disparar la bomba lacrimógena contra el estudiante, lo que le obligó a permanecer varios meses hospitalizado en el Eugenio Espejo y en el Hospital de los Valles.

Actualmente se encuentra en una vivienda entregada por el Gobierno Nacional y que se financió con recursos de Fabrec, empresa del Ministerio del Interior y del Ministerio de Vivienda.

El pasado 7 de marzo de 2012, el ministro José Serrano, en representación del Gobierno Nacional, entregó el departamento que cuenta con tres ambientes y que será ocupado por Édison y sus padres.

"Esta vivienda y demás apoyo brindado al joven y su familia, no es una compensación, sino que es parte de la responsabilidad y obligación del Estado en este caso, donde estaría involucrado un miembro policial", detalló Serrano, quien dijo que la habitación que ocupará Cosíos fue adecuada con equipos médicos especiales, que monitorearán permanentemente su estado de salud; además, de una serie de accesorios técnicos entregados por la Vicepresidencia de la República.