Policías se “hospedan” en iglesia mientras esperan UPC
Ermila Ullauri, de 65 años, afirma que vive desde hace 43 en la ciudadela La Atarazana, norte de Guayaquil, y fue testigo de la construcción del retén policial, ubicado junto a la iglesia del Señor de la Buena Esperanza, a mediados del 80.
Retén que en 1993 se lo llamó PAI (Puesto de Auxilio Inmediato) y durante la década anterior fue denominado Unidad de Policía Comunitaria (UPC) # 11.
Doña Ermila relata que hace unos 20 días, trabajadores con maquinarias llegaron de imprevisto y demolieron el retén policial. Los cuatro uniformados que prestan sus servicios en el sector, con todos sus equipos y enseres, se vieron obligados a acomodarse provisionalmente en la parroquia eclesiástica.
Los rumores de los vecinos no se hicieron esperar y vertieron varias hipótesis -unas acertadas y otras no- del porqué de la acción.
Antonio Guerrero, párroco de la iglesia, manifiesta que tuvo que solicitar información sobre la obra civil a los funcionarios del Ministerio del Interior, quienes, de manera verbal, le indicaron que en el lugar, en los próximos 3 meses, se construirá un nuevo UPC de 2 plantas con mayores comodidades. También está planificado redoblar el número de efectivos y dotarlos de movilización.
El domingo anterior, durante la misa, Guerrero informó a los fieles sobre el proyecto que se va a realizar en el lugar.
La situación es cuestionada por el párroco, quien indica que es menester que se haga partícipe a la comunidad de los planes y proyectos que van a realizar las autoridades, sobre todo, cuando se refiere al tema de la seguridad.
Actualmente la obra está paralizada, por lo que los gendarmes dudan de que se cumpla el plazo fijado, mientras tanto, en un pequeño rincón de la iglesia han hecho su base de operaciones.
El patrullaje lo efectúan a pie, puesto que desde hace 7 años la institución policial no los ha dotado de carros ni motocicletas.
El suboficial Juan Moreno señala que la única motocicleta que tenían, que en los actuales momentos se encuentra en el taller, fue donada hace 7 años por una casa comercial.
La construcción del UPC de las calles Vélez y Carchi y de la ciudadela Sauces 5 forman parte de las 104 unidades que se edificarán en Guayaquil y en las que se invertirán más de $ 18 millones, indicó el Primer Mandatario en julio pasado.
Patricio Pazmiño, comandante del Distrito Metropolitano de Guayaquil, señala que el objetivo es contar con al menos 5 UPC por cada uno de los 51 circuitos en que fue dividida la ciudad (9 distritos). Actualmente, hay 117 UPC en la urbe.
“Cada unidad contará con cerca de diez uniformados, un patrullero y una motocicleta. Cada UPC tendrá presupuesto para combustible”, manifestó.