Policía relacionado con banda delictiva fue desvinculado de la institución
En las instalaciones del Comando de Policía del Azuay se realizó este jueves el acto de desvinculación de un policía en servicio activo que estaría relacionado con una organización delictiva.
A este proceso asistieron el ministro del Interior, José Serrano; Diego Fuentes, viceministro de Seguridad Interna; Lady Zúñiga, ministra de Justicia; el general Diego Mejía, comandante general de la Policía Nacional, y autoridades de la provincia.
El detenido arribó en una aeronave de Aeropolicial y fue custodiado por miembros de las unidades especiales. En el acto se le leyeron los decretos y temas legales que justifican su desvinculación de la institución. Sus compañeros le dieron la espalda como una muestra de desaprobación a su conducta.
El general Mejía fue el encargado de retirarle simbólicamente las insignias y la gorra de la Policía Nacional, para luego entregarlas al ministro Serrano, quien a su vez solicitó que las mismas sean traspasadas a un ciudadano "que honre a la institución, a sus principios y, sobre todo, que asuma el compromiso de garantizar la seguridad ciudadana".
"Hoy es una día doloroso, como seres humanos no somos quiénes para juzgar la conciencia de otros, pero como funcionarios tenemos la obligación de erradicar cualquier acto de corrupción, de retirar a quien, utilizando el uniforme de la institución, lucre para su beneficio o de terceros", apuntó el titular de la cartera del Interior.
"Lograr ese objetivo depende de ustedes policías, ustedes quienes detienen a sus malos elementos, ustedes quienes han asumido un verdadero y transparente proceso de autodepuración, dejando a un lado ese falso espíritu de cuerpo para recuperar uno de los bienes más importantes, la confianza de la ciudadanía", agregó.
Desde que el Ministerio del Interior emprendió el proceso de depuración de la Policía, 763 elementos han sido dados de baja, mientras que otros son investigados por diferentes causas.
Antecedentes
El policía desvinculado se desempeñaba como sargento y tenía más de 20 años en la institución. Las investigaciones determinaron que estableció relación con un recluso conocido como ‘Junior’, quien está sentenciado a 25 años y sería el cabecilla de una organización delictiva dedicada al sicariato. Entre sus objetivos estaban un juez, un fiscal y seis miembros de la Policía Nacional, entre ellos un coronel.
El ministro Serrano indicó que el gendarme, identificado como Levinston A., trabajaba en el Centro de Rehabilitación Social de Cuenca. Allí presuntamente facilitaba teléfonos celulares, droga, dinero e información a ‘Junior’, quien fue capturado la madrugada de ayer durante un operativo.
"Luego de cinco meses de investigación de la Policía se descubrió la estructura delincuencial de la organización encabezada por ‘Junior’, quien ordenó el asesinato de 32 personas, 20 de las cuales se concretaron. Adicionalmente se descubrió dos armas de fuego vinculadas a 26 hechos delictivos, entre ellos asesinato", dijo Serrano.
También recordó cualquier privado de la libertad que esté vinculado con policías o con guías en actos de corrupción será procesado y recibirá la máxima sanción. (I)
