Sentado en una vereda, junto a su esposa y sus tres hijos, Daniel del Castillo contemplaba cómo un miembro del Cuerpo de Bomberos de Esmeraldas vertía agua en el lugar que hasta el lunes era su vivienda y lugar de trabajo. “Nos quedamos solo con lo que llevamos puesto, no pudimos sacar nada”, expresó.

Él es uno de los comerciantes y moradores que perdieron sus propiedades, luego del incendio ocurrido en la calle Bolívar, entre Manuela Cañizares y Mejía, en el centro de la ciudad de Esmeraldas.

El fuego fue reportado cerca de las 13:45, cuando varias personas se percataron del humo que surgía de uno de los locales comerciales. Debido a que la mayoría de los edificios del sector era de construcción mixta (madera y cemento), las llamas se expandieron rápidamente hasta afectar a casi media cuadra.

Varios de los habitantes de la zona expresaron su malestar ante la demora de los bomberos. “La primera motobomba llegó después de más de media hora y cuando quisieron abastecerse de agua ni siquiera había en el hidrante más cercano”, comentó Nancy Miranda, de 58 años.

La demora en la atención se habría producido debido a que, en ese momento, las tres unidades con las que disponen los bomberos estaban combatiendo incendios forestales en varios puntos.

Ayer se inició  peritaje del flagelo, tras lo cual se podrán valorar los daños producidos en la zonaAdemás del Cuerpo de Bomberos de la urbe ayudaron unidades de Río Verde, Viche y Quinindé, así como  de la refinería de Esmeraldas (Petroecuador), puerto de Balao, terminal del Oleoducto de Crudos Pesados y tanqueros de la Empresa de Agua Potable y Alcantarillado San Mateo (EAPA) debido a la magnitud del siniestro.

Cerca de 300 miembros de las Fuerzas Armadas y un número similar de policías llegaron al lugar para brindar seguridad ante reportes de saqueos y robos. En el lugar, cuatro personas fueron detenidas mientras intentaban sustraer objetos rescatados de las llamas.

El Comité de Operaciones y Emergencias (COE) se reunió luego de superado el flagelo, en las instalaciones del ECU-911 Esmeraldas para evaluar los daños y establecer las medidas a seguir.

El incendio dejó una persona herida con quemaduras, además de ocho edificaciones, entre viviendas y unos 50 negocios afectados. Del lado de la calle Bolívar, los establecimientos reducidos a escombros fueron una agencia del Banco Internacional, una librería, un almacén de bisutería y uno de telas. El edificio de nueve pisos donde funcionaba la mutualista Luis Vargas Torres se salvó, aunque varias de sus oficinas fueron alcanzadas por las llamas. En la calle Mejía, en cambio, entre los locales calcinados estuvieron una farmacia, una joyería, una panadería y un establecimiento de artículos para el hogar.

El ministro de Justicia, Lenin Lara, y el coronel Mario Cerda, jefe de la Policía Judicial, llegaron a la zona. El segundo de ellos comentó que con peritos de Criminalística se ha realizado el levantamiento de algunos indicios para establecer las verdaderas causas del incidente.

Mauricio Vallejo, gerente regional del Banco Internacional, afirmó que  se encontraban en custodia algunas de las cajas de seguridad de la institución y hoy esperaban el arribo de un perito, desde Guayaquil, para poder retirarlas. Asimismo, aseguró que la entidad seguirá atendiendo en una ventanilla ubicada en las instalaciones de Petroecuador.

A la zona es imposible acceder mientras no se determinen las causas del siniestro.