Luego de una reunión mantenida con los titulares de la Fiscalía General, Defensoría Pública y Ministerio de Justicia, Gustavo Jalkh, presidente del Consejo de la Judicatura (CJ), explicó el desarrollo y funcionamiento de las unidades de Flagrancia en Quito y Guayaquil.

Jalkh señaló que entre uno y diez días se han juzgado 925 delitos, que han quedado resueltos; también ha habido casos de juzgamientos inmediatos con procedimientos abreviados.

Entre 11 y 20 días se juzgaron 145 casos, mientras que entre 21 y 30 días, 184 casos fueron resueltos mediante sentencias, salidas alternativas y suspensiones. Otros 354 casos fueron solucionados en más de 30 días, dando un promedio de 28 días de juzgamiento en casos de flagrancias.  

Según Jalkh, esto significa un juzgamiento cinco veces más rápido en temas de flagrancia y cuatro veces de mayor dimensión en el mismo periodo.          

Sin unidades de Flagrancia, el 70% de casos terminaba sin una sentencia, solo con contravencionesEl funcionario resaltó el trabajo coordinado entre jueces, fiscales y defensores públicos para garantizar el debido proceso. Jalkh indicó que este mecanismo será replicado en otras provincias del Ecuador. Las autoridades hablaron del aumento de juzgados y el desarrollo de un “programa de diálogo”, es decir centros de mediación,  con el objetivo de que no todos los casos lleguen a procesos judiciales.   

Ernesto Pazmiño, defensor Público, señaló que su institución, prioriza la aplicación de medidas alternativas en los casos que requieren, para que la prisión preventiva no sea una regla general. Y anunció que próximamente se convocará a concurso para llenar más de 100 plazas de Defensores Públicos.

Las autoridades agregaron que las unidades de Flagrancia se fortalecerán  con ocho jueces penales, debido al flujo de trabajo. De igual manera, se necesita más fiscales: de los 16 que existen, se aumentarán ocho más. Mientras que el sistema de turno será mejorado para que durante las 24 horas siempre estén presentes un psicólogo, un médico legista y peritos, aparte de los fiscales y abogados.