En 2013 las 6 provincias con mayores índices de homicidios (muertes causadas, pero no planificadas) y asesinatos (planificados) fueron Guayas, Pichincha, Los Ríos, Esmeraldas, Manabí y El Oro; sin embargo, en lo que va de 2014 ya se registran disminuciones.

Las estadísticas del Centro Ecuatoriano de Análisis de Seguridad Integral (Ceasi) muestran que el año anterior, de los 1.715 crímenes de este tipo, en Guayas sucedió el 29%, en Pichincha el 12,5%, en Los Ríos el 10,6%, en Esmeraldas el 9,5%, en Manabí el 9,4% y en El Oro el 6,9%.

Conforme al balance del Ministerio del Interior, en el que compara los hechos de enero a julio en ambos períodos, hay una reducción significativa en 5 de estas provincias (no obtuvimos datos de Pichincha).

Por ejemplo, en la Zona 8 de Policía, que comprende gran parte de la provincia del Guayas (Guayaquil, Durán y Samborondón), en 2013 ocurrieron 221 crímenes, y este año el número fue de 155, lo que significa una disminución del 29,86%.

El capitán Francisco Hernández, jefe de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro (Dinased) en dicha jurisdicción, manifestó que se debe tomar en cuenta la reacción inmediata de la policía, pues gracias a los equipos hoy disponibles es posible recabar la mayor cantidad de información necesaria para localizar a los sospechosos, en algunos casos, dentro de 24 horas.

Los Ríos mostró una baja del 18% de crímenes, pues en 2013 se suscitaron 118 y este año 96. El jefe de esta subzona, coronel Lenin Bolaños, expresó que el resultado responde al trabajo coordinado con la Gobernación de la provincia, la Fiscalía General del Estado y Consejo de la Judicatura.

En Esmeraldas la reducción fue del 9% (comparada hasta junio). En 2013 se reportaron 74 muertes de este tipo, mientras que en 2014 la cifra llegó a 67.

Allí, durante los últimos 4 años la tasa de estos delitos, por cada 100.000 habitantes, bajó 15 puntos, ya que en 2010 fue de 43,32, en 2011 llegó a 41,84, en 2012 fue de 34,48 y en 2013 disminuyó hasta 28,23, según datos del Ministerio del Interior.  

En El Oro el descenso fue del 41%. En 2013 los homicidios y asesinatos fueron 85, y este año el número alcanzó 50. Para el coronel Juan López, jefe de la Dinased en la Zona 7 (también abarca Loja y Zamora Chinchipe), el trabajo preventivo es fundamental. “La Dinased interviene en el postdelito (...), lo que tratamos de ver es que no exista la impunidad y darle la tranquilidad a los familiares de descubrir cuáles fueron los autores materiales e intelectuales del hecho.

Prácticamente nosotros trabajamos en flagrancia (durante las 24 horas posteriores al hecho)”, dijo López, y acotó que en los cantones Machala, Pasaje y Huaquillas se vieron los mejores resultados.

Manabí, de las provincias mencionadas, tiene hasta el momento la respuesta más óptima, pues el decrecimiento fue del 58%. En 2013 se produjeron 106 homicidios y asesinatos, pero en 2014 la cantidad fue 45.

La semana anterior, durante la conformación de la Mesa de Justicia (reunión de secretarios de Estado) el ministro del Interior, José Serrano, mencionó que hace 20 años las muertes violentas no bajaban tan significativamente en tal jurisdicción.

El mismo José Serrano dijo a inicios de año, cuando la tasa de homicidios en el país estaba en 10,9 por cada 100.000 pobladores, que el fin era bajar a un dígito, esto ocurrió en el primer semestre, cuando decreció a 9,6, no obstante para 2017 el objetivo es llegar a 5,8.