En los próximos meses funcionarán despachos para atender casos de violencia intrafamiliar en la Unidad de Flagrancia de Guayaquil, situada en la Avenida de Las Américas, lo que significa que habrá jueces de esta materia disponibles las 24 horas del día y los 7 días de la semana.

Gustavo Jalkh, presidente del Consejo de la Judicatura (CJ), hizo el anuncio la semana anterior, luego de una reunión con los operadores de justicia de la provincia de Guayas, en la que analizaron los alcances del servicio y lo que se necesita para mejorarlo.

Jalkh informó que no obstante al aumento de resoluciones en temas de violencia contra la mujer y la familia, tomarán medidas para que la prestación de servicio amplíe su cobertura y producción. “Hay un incremento muy alto a nivel de resolución y de sentencias en comparación con lo que sucedía con las Comisarías de la Mujer, donde solo el 3% de los casos llegaban a resolución y otros quedaban en la impunidad, hoy, a nivel nacional, más del 50% de las causas sí llega a sentencia”, detalló.

Esto implica la asignación de nuevos jueces especializados, pero también la capacitación de los que cumplen funciones en materia penal, para que sustancien procesos por violencia intrafamiliar, declaró el titular del CJ.

Jalkh agregó que con esto además será posible descongestionar otros complejos judiciales donde se trata este tipo de infracciones.

Ante el anuncio, Anabelle Arévalo, vocera del Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de la Mujer (Cepam), manifestó que le parece acertada la decisión de adecuar espacios para atender a estas víctimas, que en muchas ocasiones tienen que salir en la madrugada “con lo que tienen puesto y con sus hijos pequeños (bebés) en brazos, porque les toca huir para proteger su integridad física”.

Arévalo mencionó que para atender a esta población en estado de vulnerabilidad se requiere de un espacio adecuado, confidencial, privado y con personal con alto grado de sensibilidad humana, pues a diferencia de otros delitos, los afectados sufren un duro golpe al ver transgredida la seguridad que el hogar debería proporcionarles. “Lo ideal es que este servicio abarque el norte, centro y sur de la ciudad, porque es complicado movilizarse en la madrugada de un extremo a otro”, acotó Arévalo.

Abelardo Albornoz, director de Gestión Procesal del CJ en esta provincia, comunicó que al momento se realizan los análisis para implementar estos despachos, pues el fin es que en la Unidad de Flagrancia se trate la mayor cantidad de infracciones que puedan ocasionarse durante las horas en que el servicio regular no atiende.

“Ahora se realiza un estudio técnico sobre la cantidad de jueces que vamos a necesitar, así como el espacio y el equipo:médicos y sicólogos”, manifestó Albornoz, y recalcó que todavía no hay una fecha definida para el funcionamiento.

En referencia a los magistrados que estarán a cargo de las nuevas oficinas, informó que se evalúa la carga procesal en violencia intrafamiliar, pero aclaró que la tendencia siempre será aumentar jueces y no trasladarlos de un edificio a otro, para ello se cuenta con un banco disponible, pues hace poco culminó un proceso de selección.

En la actualidad los casos de flagrancia de la Unidad Judicial Especializada contra la Violencia a la Mujer y la Familia se atienden en el Complejo de Florida Norte, situado en el km 8,5 de la vía a Daule.

Estos espacios en Guayas funcionan en Guayaquil (Florida, pronto en el Cuartel Moreno y luego en el Sur); en Durán, en la cuarta etapa de El Recreo; y en Milagro, en las calles 12 de febrero y Juan Montalvo.