Elementos de la Policía Nacional a través de la Dirección Nacional Antinarcóticos y su Unidad de Lucha Contra el Crimen Organizado (ULCO), decomisaron material explosivo que se encontraba en caletas ocultas en el sector de Salinas de la parroquia General Farfán, provincia de Sucumbíos.

El operativo, denominado Fénix, permitió la ubicación de dos centros de acopio en los que se hallaba gran cantidad de explosivos de fabricación artesanal. Personal especializado neutralizó las evidencias que tenían mezcla de urea, diésel y anfo, dando un peso de 600 libras aproximadamente.

Entre el material ubicado estaban: 100 bombas pequeñas o quiebre de piernas, 3 bombas tipo cilindro, 5 bombas medianas, 60 bombas rectangulares, 2 bombas armadas en cilindros industriales, 2 capsulas detonantes, 2 baterías de 9 voltios, 2 rollos de cable eléctrico y cordón detonante.

La autoridad competente dispuso la inmediata destrucción de los explosivos, con la finalidad de evitar el peligro que representaba su manipulación. De acuerdo con las primeras investigaciones, una organización delictiva almacenaba explosivos en lugares de difícil acceso en la frontera Ecuador-Colombia junto al río San Miguel.

En otro operativo, personal del Grupo de Inteligencia Sur (GINSUR) en coordinación con la Fiscalía de Espacios Acuáticos, Comando de Guardacostas y Policía Nacional, realizaron el hallazgo de dos escopetas y una subametralladora en una camaronera ubicada en el Golfo de Guayaquil.

Mediante operaciones especiales de inteligencia se conoció que en las instalaciones localizadas en el sector Isla de Los Chalenes, estero Carrizal del estuario del Golfo de Guayaquil, se encontraba un ciudadano de nombre Jorge Armando S. como custodio de las tres armas de fuego, las mismas que no contaban con los permisos correspondientes. (I)