Uno de los 3 adolescentes, estudiantes del Colegio Mejía de Quito, detenidos por la Policía Nacional durante las protestas en los exteriores del plantel el 19 de junio de 2015, está a punto de quedar libertad. 

Esto, luego de que el juez Iván Ron, durante la audiencia de reformulación de cargos en la Unidad de Flagrancia de Quito, determinara que los 3 jóvenes ya no serán juzgados por el delito de sabotaje, sino por el de "daño a bien ajeno".

Una vez que se conoció la disposición del magistrado, Cristian R, uno de los procesados espera que llegue la boleta de libertad, al revocarse la orden de prisión preventiva por la Corte de Pichincha.

El joven se encuenta en el Centro de Detención Provisional (CDP), ubicado en el sector de El Inca (norte de Quito). Hasta las 19:30 de hoy, el procesado no salía del centro.  

Jaime García, Defensor Público de 2 de los jóvenes, indicó que solo es un cambio de delito, y por ende de la sanción, pero el proceso legal continúa.

Katherine P, hermana de uno de los detenidos, afirmó que espera que todos los muchachos salgan libres porque son estudiantes, y en ningún momento cometieron un delito.

Según el Código Orgánico Integral Penal (COIP), la pena por el delito de sabotaje (art 345) es de 5 a 7 años de privación de libertad. Mientras que por daño a bien ajeno (art 204), en el caso de que se incendie un bien es de 1 a 3 años de prisión. (I)