Familia Cosios demandó al Estado
Édison Cosios, quien el 30 de junio cumplirá 24 años, ahora responde a ciertos estímulos, sobre todo cuando escucha la voz de su madre Vilma Pineda.
Édison lleva seis años y medio en estado vegetativo, pues tras una protesta estudiantil, el joven fue impactado con una bomba lacrimógena.
Tras un litigio de 2 años, el policía Hernán Salazar fue declarado responsable del hecho y cumplió una pena privativa de la libertad de más de un año.
Costear la salud de Édison les representa a sus padres alrededor de $ 2.000. Pineda dijo que sobreviven con el sueldo de su esposo y con el bono Joaquín Gallegos Lara, que teme que se lo quiten.
La familia Cosios y su abogado Wilson Caminos presentarán un nuevo oficio de la revocatoria de prescripción de la demanda que pusieron contra el Estado y que fue negada por el Tribunal Contencioso de Pichincha.
Con esto buscan una reparación por daños y perjuicios. (I)